El próximo 2 de febrero, el Tribunal de Audiencias de Santa Rosa (Argentina) dará su veredicto final sobre el caso de Lucio Dupuy, un niño de cinco años que fue asesinado a golpes en 2021. Las acusadas son la madre del menor, Magdalena Espósito y la pareja de ella, Abigaíl Páez.
El abuelo de Lucio señaló que mataron a su nieto “por ser varón”. “Por odio al género opuesto porque, según ellas, interfería en la relación entre ellas”, aseguró en entrevista con La Nación +.
Las ahora acusadas fueron quienes llevaron al niño a una sede policial, con convulsiones y desvanecido. Si bien llegó a ser trasladado a un centro asistencial, los médicos no pudieron salvarlo.
En 2021, la autopsia reveló que Lucio sufrió abuso sexual, quemaduras, mordeduras y un golpe en la cadera que le dificultó caminar.
“En el momento de matarlo le quebraron su cadera, tiene muchas costillas quebradas, como así también la clavícula. Tiene sus genitales mordidos a punto de cortarlos y quemaduras de cigarrillo por todo el cuerpo. Mientras lo masacraban a palos, lo violaban”, contó el abuelo del menor.
Lucio fue internado cinco veces en tres meses. La primera por traumatismo en el miembro superior y tres días después ingresó al hospital por una fractura a nivel de la muñeca y mano.
Luego ingresó otra vez por traumatismos generalizados en su cuerpo y una cuarta vez por otro golpe en el miembro superior. La última internación fue por una deformidad en el dedo, que se generó por una fractura ósea de la falange distal.