El norte de Uruguay no fue el único sitio de la región que vivió en las últimas horas fenómenos meteorológicos extremos. Cerca, al otro lado de la frontera, el estado brasileño de Rio Grande do Sul también sufrió el embate de los elementos y su capital, Porto Alegre, se vio especialmente afectada.

El periódico local Correio do Povo modificó durante la noche la portada de la tirada que tenía lista para hoy. “Noche de pavor”, tituló con sucinta elocuencia el rotativo, que en su versión digital advertía que sus propias instalaciones habían sido afectadas por el temporal, razón por la que la salida de su versión impresa afrontaba dificultades.

De acuerdo con el citado medio, la de anoche fue “una de las tormentas más fuertes que azotó la ciudad en la historia reciente”, con lluvias excesivas en un corto período, granizo y un intenso vendaval. El aeropuerto Salgado Filho registró un viento de 89 km/h, la misma velocidad observada en el Jardín Botánico. Las estaciones privadas de los clubes náuticos del sur de la ciudad registraron casi 120 km/h. Asimismo, en la cercana base aérea de Canoas se obtuvo una medida de 107 km/h.

El observatorio Metsul informó que dentro de la ciudad de Porto Alegre, anemómetros mostraron lecturas de entre 110 y 130 kilómetros, y destacó el volumen de agua registrado.

“En apenas una hora, durante la tormenta, las lluvias torrenciales acumularon entre 60 y 70 mm en distintos puntos de la ciudad. Es decir, en apenas 60 minutos llovió la mitad del promedio histórico de todo el mes de enero en la ciudad, que es de 120,7 mm”, reportó la institución.

“La gravedad de la tormenta en Porto Alegre fue una de las mayores en la historia reciente de la capital, con similitudes con los episodios de clima severo de octubre de 2015 y enero de 2016”, detalló el observatorio, que agregó que en la tempestad de anoche algunos puntos en las afueras de Porto Alegre registraron vientos más intensos que los de aquella ocasión.

Daños

La tempestad produjo cuantiosos daños en la ciudad, y dejó imágenes impactantes.

Muchos inmuebles se quedaron sin tejados, hubo caída de árboles e inundaciones en varias zonas.

Los hospitales se vieron afectados y algunas salas quedaron inoperables. Según el Departamento Municipal de Salud de Porto Alegre, el Hospital Fêmina tuvo todos sus pisos inundados, y parte del área de cardiología quedó inoperativa. Otros hospitales, como Pronto Socorro y Hospital Materno Infantil Presidente Vargas, también resultaron afectados.

Los fuertes vientos derribaron también un pórtico de la autopista Freeway. La carretera quedó completamente bloqueada en dirección de entrada a la ciudad durante varias horas.

Según el gobierno de Porto Alegre, la falta de electricidad afectó a las estaciones de bombeo de agua y provocó falta de suministro en varios barrios. Los servicios telefónicos y de internet también registraron cortes e intermitencias.