El subdirector ejecutivo de la Policía Nacional, Jorge Berriel, declaró este miércoles ante la Fiscalía en el marco de la causa que indaga la entrega de pasaportes falsos a ciudadanos rusos, y que investiga, entre otros asuntos, los chats del exjefe de custodia presidencial Alejandro Astesiano.
“Lo que me interesa especialmente aclarar es que Berriel recibió una orden directa al inicio de este gobierno de parte del entonces ministro Jorge Larrañaga, en la cual le presenta a Alejandro Astesiano y le dice que todo lo que pida Alejandro Astesiano es como que lo pida el propio ministro, invocando en esa conversación al presidente de la República”, afirmó Andrés Ojeda, abogado del jerarca policial.
En este sentido, Ojeda sostuvo que “por esa razón es que Berriel le ha enviado las cosas a Astesiano”.
El 3 de julio de 2022, dos meses después de que se conociera la noticia de la separación del presidente Luis Lacalle Pou y su esposa, Lorena Ponce de León, Astesiano pidió a Berriel que averiguara en “modo reservado” sobre un viaje personal de la expareja del jefe de Estado.
En tanto, el pasado 3 de mayo Astesiano se comunicó con Berriel para pedirle información sobre una denuncia de abuso que hizo una joven en el marco de una fiesta de la Juventud del Partido Nacional.
Ojeda remarcó que Berriel “no conocía” al exjefe de la custodia presidencial. Además, aclaró que en las conversaciones que se conocieron también participó el exdirector general del Ministerio del Interior Luis Calabria.
El abogado afirmó que el subdirector de la Policía Nacional tuvo la voluntad de ir a declarar a Fiscalía y que la única conversación que mantuvo con Astesiano fue la que se conoció en la prensa.
“Si la orden dada por el ministro es que la información se le otorgue, visto que sería para el presidente, no le corresponde a Berriel hacer valoraciones en lo que da y deja de dar”, manifestó Ojeda.
“Tampoco tiene porqué saber el detalle de lo que se pide. De hecho, Berriel no los investiga, apenas pide la información a la unidad que se ocupa”, agregó.
Al ser consultado por la legalidad de la información que entregó el subdirector ejecutivo de la Policía, respondió: “Eso está en cuestión valorativa” y que “corresponde” a Fiscalía.
“Evidentemente los partes policiales son reservados, todos lo sabemos. Ahora, cuando lo pide un jerarca superior es claro que el inferior cumple”, agregó.
Ojeda explicó que la Policía es “extremadamente vertical”, por lo que las órdenes, salvo aquellas consideradas “manifiestamente” ilegales, “no se cuestionan”. “Entiendo que Berriel no cometió delito”, expresó.
Por otro lado, el abogado afirmó que “no está sobre la mesa ninguna renuncia”, en alusión al funcionario. “Tampoco es de mi intervención la decisión que Berriel tome sobre su futuro profesional”, acotó.
“Él se retiró de la Policía hace ya varios años y hoy es recontratado como personal de confianza civil, por lo cual no correspondería hacerse una separación del cargo; o lo mantienen o lo sacan. Él pidió licencia reglamentaria simplemente a los efectos de no estar mientras prestaba declaraciones”, explicó Ojeda.
Además, informó que la fiscal Gabriela Fossati abrió otra carpeta investigativa sobre las filtraciones a la prensa que se han generado en este caso.