La familia de Milagros Chamorro, la joven de 29 años que en 2022 denunció haber sufrido una violación cuando era menor de edad, y que el 25 de octubre pasado se quitó la vida, designó abogados para decidir qué acciones legales impulsarán contra la mutualista Casmu, donde ocurrió el suicidio.

Los defensores que asumieron el patrocinio de la familia de Milagros son Dahianna Romero y Santiago Mirande, quienes la semana pasada tuvieron acceso a la carpeta fiscal que se abrió tras la denuncia de abuso presentada por la joven. Precisamente, Chamorro acusó a cinco hombres —uno mayor y cuatro menores de edad en aquel momento— por haber abusado de ella hace más de 14 años.

Mirande contó a Montevideo Portal que están manteniendo las primeras reuniones con la familia para decidir a quiénes se demandará y denunciará, tras el suicidio de la joven de 29 años. En la carpeta fiscal se muestran los dos archivos que tuvo la causa, luego de que Milagros denunciara el hecho por primera vez.

“Encontramos bastante material y bastante prueba, pero muchas de ellas no están diligenciadas”, agregó el defensor. Mirande expresó que “el tema más complicado” es lo que tiene que ver con la prescripción de los delitos y consideró que allí el problema es de fondo “porque la sociedad no puede tolerar que el abuso sexual infantil prescriba”.

Mirande explicó que habrá que analizar dicha prescripción teniendo en cuenta cuándo comenzó a regir el plazo para que los delitos prescriban. Es decir, como Milagros denunció pasados los años de haber sido víctima del hecho, puede caber la posibilidad de que esos ilícitos sigan vigentes. “Ella no denuncia porque no quiera, sino que lo hace cuando está en condiciones psíquicas”, añadió el abogado.

“Hay pruebas de que el delito se cometió y hay pruebas no diligenciadas, y eso implica analizar cómo la Fiscalía abordó el tema; por ejemplo, la declaración testimonial de determinadas personas. Milagros murió pocos días después del archivo de las actuaciones, eso podría haber contribuido a su muerte”, sostuvo Mirande.

Con respecto a que el suicidio se haya dado dentro del Casmu, el defensor explicó que el camino a seguir puede ser una demanda contra la institución médica, así como también contra los profesionales que atendieron a Milagros y los funcionarios administrativos que estuvieron el día de su muerte.

“Milagros se les mató en la cara y desde el 17 de setiembre de 2010 a Milagros la fueron matando en vida”, cerró Mirande.