Después de la polémica que desató la imagen de una figura con una estrella de David en la frente y atravesada por una lanza en el marco del 8M, que fue denunciada ante la Fiscalía General de la Nación por el Comité Israelita, algunos partidos políticos e integrantes de la coalición de gobierno repudiaron los hechos.
El senador blanco Javier García presentó este martes una moción en rechazo de las manifestaciones, que calificó de “antisemitas”. Si bien aclaró que su fin no es “generalizar”, y tampoco “está vinculado al derecho de expresión que tiene cualquier idea libremente en el Uruguay”, el exministro de Defensa Nacional sostuvo que las mujeres involucradas en este acto graficaron “un signo nazi”.
“Lo que expresa esa imagen es claro, nítido: esa imagen decía, por intermedio de quienes lo portaban, mueran los judíos”, señaló García. Así, el exjerarca fue tajante: “No hay que tenerle miedo ni a las palabras ni a lo que significan algunas ideas; en esa expresión tan gráfica se recuerdan, se reviven y se legitiman las ideas más bárbaras por las que atravesó el mundo, y no hace mucho”.
“Dejar pasar inadvertidamente, naturalizar estas expresiones, yo no digo que es ser cómplice, que sería muy grave, pero sería ignorar que así comenzaron las peores tragedias del mundo”, agregó. De este modo, García aseguró que este caso le “corresponde” a la Justicia, que deberá “analizar” y “condenar las expresiones de odio”.
El senador blanco y precandidato a la Presidencia Jorge Gandini también se expresó al respecto. Este lunes, el legislador comunicó a través de su cuenta de X (antes Twitter) que se dirigía al Directorio del Partido Nacional (PN) “con la intención de proponer una declaración de repudio a lo manifestado por algunas mujeres y niñas en la marcha del 8M”.
En esta línea, el precandidato blanco apeló a “rechazar y sancionar los hechos y discursos que promueven el odio”. En tanto, el PN emitió un comunicado sobre su posición del suceso y señaló “su más absoluto repudio por la aparición de actos de antisemitismo por parte de algunas personas que utilizaron la marcha del 8M para manifestarse”.
El Partido Nacional se sumó al rechazo y expresó que “estas manifestaciones por parte de una minoría utilizan la gran movilización popular para crueles fines, ajenos al fundamental objetivo de la marcha”.
Asimismo, el directorio nacionalista sostuvo que este tipo de “muestras de odio e incitación a la violencia” son “propias de épocas oscuras” y que “no representan los valores” del país.
“Una vez más condenamos estos actos que violan los derechos humanos fundamentales y nos solidarizamos con la comunidad israelita”, termina la declaración firmada por Pablo Iturralde, Armando Castaingdebat, Macarena Rubio y Jorge Gandini.
Asimismo, el Partido Independiente (PI) también se posicionó con respecto a los hechos del pasado 8 de marzo.
En primer lugar, el partido que lidera el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, manifestó su “profundo repudio a estos actos de discriminación racial, con clara intención de incitar al odio y la violencia contra la comunidad israelita y judía, [que] reivindican consignas de un grupo terrorista”.
El PI también presentó su reclamo ante la Fiscalía de Corte, “para que se inicie una investigación de oficio ante la clara violación de normas jurídicas penales, y ante al Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay [INAU] para que investigue la participación de niñas y adolescentes en estos actos de discriminación racial por la eventual responsabilidad de quienes deben ejercer la patria potestad”, dice la misiva.
En tercer lugar, el partido político lamó a la “reflexión”, con el fin de que “estos hechos no se repitan, recreando plenamente el respeto y la tolerancia como claves de convivencia de nuestra sociedad”.
Por último, destacó el movimiento de mujeres que desde 1985 “ha hecho un aporte fundamental a la construcción de la democracia en nuestro país, con su ejemplo de integración y respeto a todas las corrientes y opiniones”.
Sin embargo, este hecho y otros de intolerancia política y religiosa que han ocurrido en los últimos años, han determinado la exclusión de una parte de la ciudadanía que apoya y comparte los postulados de alcanzar la igualdad sustantiva, y mejorar así, aún más, la calidad de nuestra democracia”, concluyó.
María Eugenia Rosello, diputada por el Partido Colorado, también se pronunció en X: “Todas las personas y organizaciones comprometidas con la lucha por los derechos de las mujeres deben rechazar y condenar este tipo de expresiones discriminatorias”.
Asimismo, el diputado colorado Felipe Schipani escribió en sus redes sociales: “El antisemitismo está muy presente en nuestra sociedad. Esto que vimos ayer es absolutamente repudiable, más aún porque utilizan niñas que no deben tener cabal dimensión de lo que están haciendo”.
El legislador Ope Pasquet señaló: “Esta incitación al odio contra los judíos siempre sería condenable, pero cuando Hamás tiene mujeres judías secuestradas hace cinco meses, me parece de lo peor que hayamos visto en mucho tiempo”.