A diferencia de lo que sucede en la mayoría de las democracias del mundo, Uruguay no cuenta con ningún mecanismo que permita a los ciudadanos radicados en ele extranjero ejercer el voto desde sus lugares de residencia. Por ello, quienes viven en el exterior y desean participar en actos eleccionarios, deben viajar al país para hacerlo en persona.
Esta situación presenta algunas paradojas. Por ejemplo, se ha dicho, por ejemplo, que los uruguayos que viven fuera no deben votar para instalar gobiernos que luego no gozarán o padecerán. Este argumento, endeble incluso desde la lógica, cae por su propio peso debido a que quienes disponen de tiempo, dinero y voluntad para viajar, pueden ejercer su derecho sin complicaciones y lego marcharse otra vez.
La cuestión del voto epistolar se sometió a plebiscito en octubre de 2009 y —como sucede con la mayoría de los plebiscitos del país— no prosperó. Un 36,93% de los electores votaron por su implementación, mientras que un 63,07% se pronunció en contra.
Esta imposibilidad de voto desde el extranjero ha hecho que históricamente los candidatos en campaña procuren captar los votos de los ciudadanos que se trasladan desde el extranjero. Y suelen apuntar a la vecina argentina, por su proximidad geográfica y gran cantidad de emigrantes. Así, el denominado coloquialmente “voto Buquebus” se instala en la agenda política cada cuatro años.
En busca de ese voto, varios referentes de la coalición de gobierno viajaron en las últimas horas a Buenos Aires, donde celebraron un acto bajo la consigna #uruguayosenargentina.
Uno de los oradores fue el senador nacionalista Sebastián da Silva, quien hizo a los expatriados un exhorto con ribetes épicos.
“Les pedimos que el esfuerzo sea en llamar a uruguayos. Nadie más que ustedes saben dónde están los uruguayos. Esos uruguayos son héroes libertadores que vienen de Argentina y cruzan a salvar la patria”, expresó en alusión a la Cruzada Libertadora de 1825.
Estas palabras fueron criticadas por el senador frenteamplista Mario Bergara, quien en su cuenta de X se despachó contra la “pesca” de votos en ele extranjero por parte de los partidos coaligados.
“Cuantas contradicciones salen a la luz en tiempos electorales. Todos los argumentos que han manejado para evitar que voten los uruguayos en el exterior (que no residen acá, que no sufren las consecuencias, que no pagan impuestos, etc.) se derrumban solos”, manifestó Bergara.
“El derecho al voto no puede depender de poder pagar el traslado; los derechos son para todos y todas por igual y el Estado debe ser garante de que se puedan ejercer. Vamos a seguir trabajando por el voto consular para que todos los compatriotas pueden ejercer el derecho a la participación política”, agregó.
Antes, el contador Gustavo Viñales, quien fuera asesor del equipo de Daniel Martínez en la campaña pasada y es consultado puntalmente por el comando de Yamandú Orsi, se había manifestado en parecidos términos.
“Los mismos que niegan sistemáticamente el voto consular de los uruguayos en el exterior, los llaman ‘héroes libertadores’ cuando los necesitan para que voten por su partido. La hipocresía y la política como herramienta para defender intereses propios, es la única constante”, criticó Viñales.