El domingo 7 de abril, una familia se encontraba descansando en el paraje riverense de La Calera, cerca de la localidad de Minas de Corrales.

El grupo estaba compuesto por una mujer de 34 años, enfermera que se desempeñaba en la ciudad tacuaremboense de Caraguatá, su compañero, un policía de 51 años que revistaba en la misma localidad, y los hijos de ambos, dos niños de 4 y 6 años.

Esa tarde, el agente tomó un arma de fuego y disparó contra su familia y luego se suicidó. Los niños murieron de inmediato y la mujer recibió un disparo en el vientre y un roce de bala en la cabeza. Ingresada e intervenida en el Hospital de Tacuarembó, la enfermera sobrevivió y fue dada de alta días más tarde.

Si bien el caso fue terrible por sus consecuencias, desde el punto de vista de la investigación no parecía complejo: la múltiple agresión había sido obra del policía, quien había muerto por mano propia luego de perpetrarla.

Sin embargo, y ante la inminencia del archivo de la causa, la familia del uniformado pide una revisión del caso.

Según informara el periodista tacuaremboense Marcos Pereira, el caso se cerró con la conclusión de que el agente había llevado a cabo todas las acciones que llevaron a la muerte de sus hijos, la lesión de su compañera y su propio deceso. Sin embargo, los familiares del agente pretenden que se lleven a cabo nuevas acciones.

En su pedido, manifiestan su voluntad de que las pericias efectuadas en su momento sean reexaminadas por “un prestigioso perito” particular al que pretenden convocar. También desean que se lleve a cabo la reconstrucción de los hechos “a la luz de los elementos aportados a la investigación y el propio relato de la única sobreviviente”.

Asimismo, consideran pertinente tomar nueva declaración a los testigos que —por obvias razones— no presenciaron los hechos, pero fueron los primeros en tomar contacto con la escena.

Del mismo modo, buscan que se tome y considere la declaración de familiares “sobre asuntos de la interna familiar y sobre aspectos que igualmente hacen a la investigación”, detalla el cronista.