En la Convención del Partido Nacional celebrada el pasado sábado, varios dirigentes y figuras políticas del oficialismo se refirieron al cruce que protagonizaron el presidente Luis Lacalle Pou y el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, quien además es precandidato por el Frente Amplio.
La vicepresidenta Beatriz Argimón recomendó que quienes compiten por las elecciones nacionales, deben medirse a la hora de hacer manifestaciones. “Tienen que cuidar mucho los códigos de relacionamiento”, agregó Argimón.
En referencia a las palabras de Orsi sobre el pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset, Argimón sostuvo que nunca se le “ocurriría” decir que el “Frente Amplio tenía cierta vinculación o el mismo discurso de los narcos” en el marco de la fuga del mafioso Rocco Morabito.
El ministro de Defensa, Javier García, defendió a Lacalle y aseguró que el mandatario “hizo algo que es de gente de bien porque en la política hay cierta hipocresía”. “Uno ve a los dirigentes políticos que por la prensa agravian, insultan, pero cuando está frente a frente no dice nada”, añadió el secretario de Estado.
El otro que se refirió a la polémica fue el ministro de Desarrollo Social, Martín Lema. Sobre los dichos de Orsi, Lema los catalogó como un “gesto mezquino y cobarde”. “El intendente de Canelones debería pedir disculpas, pedir disculpas a la gente, a la ciudadanía. A mí no me queda claro qué pasa con Orsi, si se disfraza de moderado o si los radicales se lo llevan puesto”, consideró.
El senador oficialista Sebastián Da Silva apuntó contra el jefe comunal y aseguró que “es un candidato zaraza de los que no bancan la toma”. “Tiene otros códigos y era hora de que alguien lo pusiera en su lugar”, comentó.