Volvo anunció que estaba retrasando la producción de su SUV eléctrico insignia de próxima generación, el 2024 EX90, citando la necesidad de más “pruebas y desarrollo de software”.

Se esperaba que el EX90, un automóvil familiar de lujo de siete plazas con 300 millas de alcance y un precio inicial de menos de $ 80,000, entrara en producción a fines de 2023 y llegara a los pisos de exhibición a principios de 2024. Ahora la producción no comenzará hasta la primera mitad de 2024, dijo el fabricante de automóviles sueco en un comunicado. Eso probablemente significa que los clientes no recibirán la entrega hasta la segunda mitad del año.

“La demanda del Volvo EX90 sigue siendo alta y para garantizar una presentación del automóvil de alta calidad y maximizar el beneficio para el cliente de su tecnología desde el día 1, Volvo Cars necesita tiempo adicional en el desarrollo y las pruebas del software y está ajustando el tiempo planificado para el inicio de la producción. ”, dijo Volvo.

Cuando se presentó por primera vez a fines de 2022, el EX90 se destacó como uno de los vehículos más avanzados en computación jamás fabricados. Eso fue evidente en los proveedores que Volvo había elegido para desarrollar las características ricas en software del vehículo, incluidos Nvidia, Luminar y Qualcomm, entre otros.

Pero ahora que el EX90 se está retrasando debido a sus demandas de software, algunos de esos socios niegan rápidamente cualquier participación en la decisión. Luminar, por ejemplo, emitió una declaración señalando que el cambio de tiempo “no estaba relacionado con Luminar”.

Luminar fabrica sensores láser llamados lidar que pueden ayudar a generar un mapa 3D del entorno alrededor del automóvil para funciones de seguridad activa y conducción autónoma. Volvo es uno de los pocos fabricantes de automóviles que incluye lidar, calificándolo como un ingrediente esencial en su búsqueda para eliminar por completo las muertes por accidentes de tránsito. El lidar de la EX90 tendrá un alcance de 250 metros con la capacidad de detectar algo tan pequeño y oscuro como un neumático en una carretera negra 120 metros más adelante, todo mientras se conduce a velocidades de autopista.

Esta no es la primera vez que los problemas de software han enredado los programas de producción de vehículos. El primer EV de largo alcance de Volvo, el XC40 Recharge, se retrasó en los puertos de EE. UU. a principios de 2021 porque la compañía tuvo que esperar para enviar una actualización de software crucial antes de lanzarla a clientes y distribuidores. Volkswagen, Ford y otros han visto cambios en los horarios y retiros emitidos como resultado de errores de software.