Hay juegos que trascendieron años y años de cambios de tendencias y de modas pasajeras. Esto se debe a que siguen resultando entretenidos y tienen un “algo” que los convierte en clásicos de todos los tiempos. Además, la facilidad para comprender las reglas y la facilidad de adaptación son factores que permiten a los jugadores entretenerse con estos juegos de generación en generación.  

Es más que seguro que ya jugaste a todos estos juegos, pero, a continuación, te contaremos cuáles son estos tres clásicos de todos los tiempos: el ajedrez, el solitario y el famoso dominó. Así como también te explicaremos un poco sobre su historia y cómo se juegan.  

Ajedrez 

Además de ser considerado un juego, el ajedrez es catalogado como un deporte mental. Esto se debe a que exige una gran capacidad de concentración y de planificación. Así como también la toma de decisiones en una ventana de acción corta es fundamental para lograr anticipar los movimientos de un oponente y adaptarse en consecuencia a ellos.  

Las reglas del ajedrez ya son más que conocidas. El tablero está conformado por una cuadrícula de 8 filas x 8 columnas, en las que se disponen 32 piezas (16 por cada jugador) que se mueven de distintas formas. Hay maneras de entrenar las habilidades de juego de ajedrez a fin de poder conseguir mejores resultados, pero también hay un gran factor de talento natural y de la forma en la que funciona cada mente.  

Solitario 

El solitario es uno de los juegos de cartas más populares de todos los tiempos. Esto se debe a que, tal como lo indica su nombre, se puede jugar de forma individual, por lo que es muy simple y entretenido.  

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En las variantes de solitario online, pueden encontrarse hasta tres maneras distintas de jugar a este juego. Estas variantes van a depender de las intenciones de cada jugador y de las reglas preestablecidas de cada tipo de solitario. Estas alternativas son las siguientes:  

Encadenamiento de secuencias: dada una serie de cartas iniciales dispuestas en una fila, se pueden ir armando secuencias ascendentes (desde el as hasta el rey) o descendentes, que parten desde la carta inicial. El juego termina cuando se ordenaron todas las cartas del mazo, por lo que se mezcla y se vuelve a empezar.  

Formación de parejas: en esta modalidad se hace un emparejamiento de las cartas de un mismo valor, que se van eliminando a medida que se juntan, hasta que no queda ninguna.  

Sumas: en esta modalidad se juntan cartas que conforman un valor específico, ya sea 11 o 13 puntos, y se van eliminando a medida que se emparejan. El juego termina cuando el jugador ya no puede deshacerse de más cartas.  

Para algunas personas, una modalidad resulta más entretenida o desafiante que otras, aunque todas tienen una misma base, que es la búsqueda de patrones y la toma de decisiones a partir de la configuración de una matriz inicial. Un dato curioso para tomar en cuenta es que este juego se llamaba originalmente “patience” en los registros más antiguos que se tienen de él en las fuentes de origen británico. Esto se debe a que es un juego que tiene como objetivo desarrollar la paciencia.  

Dominó 

Este juego que utiliza las tan conocidas fichas de dominó fue originado en China y se estima que tendría casi unos mil años de antigüedad, por lo que trascendió fronteras culturales y temporales. La configuración de este juego es, de manera estándar, de unas 28 fichas, pero hay otras modalidades que cuentan con 55, 91, 136 y hasta unas 190 fichas distintas.  

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La forma de jugarlo varía también dependiendo de la forma en la que se establezcan las reglas según la región. Pero, en general, se considera que se termina una serie cuando se consiguen cuatro fichas que tengan la misma cantidad de números en cada lado. Al terminar una serie, gana el jugador que tenga la menor cantidad de fichas en total.  

En conclusión, es posible encontrar muchos juegos tradicionales que se siguen jugando hasta la actualidad y que cuentan con tanta popularidad o incluso más que cuando se crearon. Es por esta razón que resulta importante mantener estas tradiciones y volver a jugar estos juegos clásicos que trascendieron la historia.  

Fuente: Goodlymedia.