El hogar es el lugar más importante del mundo para las personas. Pero es algo tan obvio y asumido que generalmente cuesta valorarlo en su justa medida. Es que, además de ser el lugar donde uno recibe el cariño, el cuidado y la educación para su desarrollo, es también el primer contacto que el ser humano tiene con la sociedad a través de la relación con su familia.

Resaltando al hogar como "el ámbito de desarrollo de las personas", el Centro Walmart Conciliación Familia y Empresa del IAE Business School (en alianza con la Home Renaissance Foundation de Reino Unido y el Centro Cultura, Trabajo y Cuidado del INALDE Business School de Colombia), realizó un estudio pionero a nivel mundial con el propósito de analizar la valoración que se hace sobre las tareas domésticas, cómo se distribuyen, y el tiempo y responsabilidad que se les dedica a ellas.

Los datos fueron recogidos en 94 países a través de muestras no probabilísticas de tipo descriptivo y la encuesta sigue abierta enwww.globalhomeindex.org para seguir sumando respuestas de quienes deseen participar de la misma. En Uruguay, la encuesta fue promovida a través del Centro de Investigación en Economía Aplicada de la Universidad de Montevideo. La encuesta, que buscar investigar cómo compatibilizan los jefes de hogar el trabajo profesional y la atención a la familia, se administró mayoritariamente a universitarios profesionales.

En la encuesta participaron 440 personas de entre 23 y 67 años: 283 mujeres y 153 hombres. Si bien en los últimos años los hombres han asumido nuevas y mayores responsabilidades dentro del hogar, según este estudio, las mujeres siguen dedicando más horas del día a las tareas hogareñas que los hombres en los 20 países del primer informe de resultados.

En promedio, una mujer dedica entre 14 y 23 horas semanales a las tareas domésticas (a excepción de las italianas, que dedican 9 horas), mientras que los hombres destinan entre 6 y 16 horas semanales. Argentina es, según los datos que arroja el estudio, el país que más horas invierte en el trabajo del hogar. En Uruguay, tanto hombres como mujeres tienen una alta dedicación respecto al resto de los países: 20 horas las mujeres y 15 horas los hombres (en promedio).

En el podio también están Brasil (21 horas para las mujeres, 15 para los hombres), Colombia (21 horas para las mujeres, 14 para los varones) y Bolivia (18 y 14, respectivamente). Los resultados del estudio indican que alrededor del 50% de los participantes están totalmente de acuerdo con que la sociedad valora más el éxito profesional que ocuparse de las tareas del hogar. Cabe destacar que Portugal es el país que obtuvo el porcentaje más alto de valoración de éxito profesional (69% de las mujeres y 67% de los hombres), seguido de Italia (67% de los varones y 50% de las mujeres),
mientras que Kenia obtuvo los porcentajes más bajos (36% de las mujeres y 28% los varones).

Los participantes del estudio afirmaron también estar totalmente de acuerdo con que la realización de las tareas del hogar contribuye a desarrollar competencias para otras áreas de la vida. Esto significa que las labores domésticas ayudan a cultivar habilidades y a forjar valores que pueden ser transferidos a otros ámbitos de la vida en las relaciones interpersonales, como pueden ser aprender a servir a los demás, adquirir hábitos como el orden, la responsabilidad o la solidaridad, y luego ejercitarlos en el trabajo, el estudio y en la vida social. En Uruguay, el 50% de los participantes siempre almuerzan o cenan en familia.

Más de la mitad de los encuestados generalmente cocinan comida cacera para la familia, se ocupan personalmente del orden y la limpieza del hogar, organizan el mantenimiento de la casa. Más del 80% de los participantes realizan las compras del hogar y enseñan en la familia el cuidado de los detalles materiales de la casa (ej. no dejar luces encendidas innecesariamente, arreglar pequeños desperfectos, tener un encargo dentro de casa, etc.). Tan sólo un 8% de los encuestados dedica tiempo a capacitarse para sacar adelante la organización de las tareas del hogar.