Pfizer comunicó la llegada a Uruguay de su compuesto antiviral oral creado especialmente para tratar casos de riesgo de la enfermedad covid-19. El nirmatrelvir fue aprobado recientemente por el Ministerio de Salud Pública para su uso en nuestro país, con el objetivo de evitar la internación en casos de alto riesgo.

Para comunicar la novedad del laboratorio, se realizó un evento para la prensa el jueves 4 de mayo en el hotel Hyatt Centric de Montevideo. El encuentro contó con la presencia del asesor del Comité Panamericano de Infectología, el doctor Eduardo Savio; el coordinador de Epidemiología Hospitalaria del Hospital de la Universidad Autónoma de Nuevo León (México); el doctor Adrián Camacho y corporativos de Pfizer.

La actualidad de la pandemia en Uruguay

El infectólogo uruguayo Eduardo Savio especificó que, desde el 13 de marzo de 2020 a la fecha, se han registrado 900.000 casos positivos y 7.000 muertes. La taza de efectividad en marzo de este año fue de 3,6%, lo que, según Savio, “daba mucha tranquilidad” porque “nunca estuvimos tan bajo”. Sin embargo, para el 12 de abril la tasa escaló hasta el 15,8%. “Esto no nos debe asustar, pero sí nos demuestra claramente que el covid-19 sigue estando presente y no podemos ignorar. La tendencia de aumento se mantendrá en los siguientes meses”, enfatizó.

El especialista recomendó continuar el estudio genómico del virus, seguir insistiendo a la población en la actualización de las dosis de la vacuna y la utilización de antibióticos de vía oral de forma ambulatoria para personas de alto riesgo. En esta línea, presentó el nuevo antiviral de Pfizer “especial para adultos mayores y diferentes comorbilidades como cardiopatías, diabetes, nefropatías, entre otras”.

El nirmatrelvir

Para explicar más sobre el uso del nuevo antiviral, tomó la palabra el doctor Adrián Camacho y comenzó especificando que en México también existe la misma tendencia de persistencia de la tasa de positividad como la hay en Uruguay.

El tratamiento funciona como inhibidor de las enzimas que permiten la multiplicación del virus dentro de la célula, pero no acorta el aislamiento que se le solicita a los que tienen la enfermedad.

“El nirmatrelvir es un medicamento que va específicamente en contra del virus”, indicó el doctor, y agregó que el antiviral va acompañado del ritonavir —antiviral conocido para el tratamiento del VIH— que funciona como potenciador.

Según los estudios del laboratorio, si no se utilizan juntos, el nirmatrelvir podría llegar a perder la concentración en sangre hasta un 50%. Esto se debe a que el ritonavir bloquea principalmente al hígado en el proceso de metabolismo y evita la eliminación rápida del nuevo antiviral en el torrente sanguíneo.

Camacho explicó que la dosificación aprobada para adultos y para niños mayores de 12 años que superan los 40 kilogramos es una dosis estándar si hay buena función hepática y renal. Se trata de dos cápsulas —300 miligramos— de nirmatrelvir y una cápsula —100 miligramos— de ritonavir cada 12 horas durante cinco días.

“El tratamiento es para la fase temprana de la enfermedad, los primeros cinco días de los síntomas. Si se pasa ese período, el medicamento pierde mucha de su efectividad”, afirmó el doctor.

“Lo ideal es que sea indicado para pacientes que no requieren oxígeno suplementario y están dentro de los cinco primeros días de los síntomas, pero por sobre todo para aquellas personas que pueden ser propensas a desarrollar complicaciones por covid-19”, afirmó.

El acceso a la población

El medicamento estará disponible únicamente con receta, ya que el equipo médico tiene que llevar un control y saber si, efectivamente, el paciente puede consumir el antiviral. Además, se debe realizar un monitoreo del paciente enfermo.

Santiago Belga, subdirector de asuntos corporativos para Pfizer, afirmó que las droguerías y prestadores de salud ya pueden adquirir el antiviral y que actualmente un seguro de salud ya tiene a la venta el medicamento.

En Uruguay el precio aún no está definido, pero en otros países el antiviral cuesta alrededor de US$ 500. Pfizer apuesta a que los prestadores de salud puedan cubrir parte de los costos en beneficio de sus socios. “Al corto plazo, no va a estar ligado al Fondo Nacional de Recursos”, concluyó Belga.