Los viajeros recuperaron la confianza en el turismo y se sienten más seguros después de viajar, según un estudio realizado la consultora PwC que encuestó a más de 1.000 consumidores en Estados Unidos en julio respecto a la recuperación de sus hábitos viajeros, concluyendo que junto a la salud y la seguridad, el precio vuelve a ser una consideración a tener en cuenta.
Las principales conclusiones son que aunque continúa la incertidumbre sobre las implicaciones del COVID-19 para la salud pública y la mayoría de los consumidores siguen siendo cautelosos con los viajes que realiza, los que han viajado recientemente aseguran que han aumentado sustancialmente su confianza al comprobar que pueden volver a realizar la actividad con total garantías de seguridad.
Entre los encuestados que viajaron desde mayo, el 58% espera reservar viajes aéreos en los próximos meses (en comparación con el 46% que así lo aseguraban en una encuesta realizada en abril), mientras que el 74% espera alojarse en un hotel de marca (en comparación con el 57% en abril).
En contraste, los encuestados que no habían viajado desde mayo dijeron que aseguraban que tenían menos probabilidades de viajar en los próximos tres meses, con solo el 26% que creen que viajaran en avión y el 38% confiaba alojarse en un hotel de marca.
Los consumidores que viajaron desde mayo también muestran una disminución importante de la ansiedad en los viajes que realiza. Antes de viajar solo el 11% aseguraba que no le preocupaban las medidas de salud y seguridad durante el viaje aéreo y sólo el 16% aseguraba no estar preocupado por las estancia en los hoteles.
Después de viajar la proporción de quienes no estaban preocupados por las medidas de salud y seguridad casi se quintuplicó para los viajes aéreos y más del triple para las estadías en hoteles. En ambos casos, el 50% dijo que no estaba preocupado.
De hecho, aseguraron que se sienten tan cómodos con los protocolos de salud y seguridad actualmente vigentes que es más probable que seleccionen proveedores de viajes en función del precio, a diferencia de principios de año, cuando la seguridad era lo más importante.
La lealtad a la marca también está cambiando, ahora es probable que el 37% de los consumidores están dispuestos a cambiar de aerolínea de referencia y un 41% de hotel. Casi el 40% está indeciso, lo que los convierte en los principales candidatos para ofertas específicas.
El riesgo permanece siempre presente
En julio, los consumidores continuaron siendo cautelosos respecto a las reuniones sociales. La mayoría de los encuestados, el 76% asegura que evitaría lugares de reunión como restaurantes, salones, tiendas minoristas y otras áreas comunes de los aeropuertos.
Los encuestados también son tan cautelosos en la información sobre las medidas de seguridad y salud pública a tener en cuenta. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) siguen siendo la fuente más fiable para los viajeros frente a otras entidades gubernamentales y empresas privadas en las que confían menos.
Los viajeros desean recibir información clara, coherente y continua sobre las medidas de seguridad que pueden proteger su salud cuando viajan. De hecho, el 80% de los consumidores aseguran que toman decisiones sobre dónde alojarse o cómo llegar basándose en las recomendaciones de sus proveedores de viajes.
Con información de Europa Press