La empresa de lanzamiento de satélites Virgin Orbit, con
sede en California y propiedad del multimillonario británico Richard Branson,
se declaró en bancarrota tras no conseguir financiación suficiente para seguir
operando.
Hace solo unos días, la compañía dijo que despediría al 85 % de su plantilla
para reducir costos. “A pesar del gran esfuerzo que hemos hecho para hacer frente a nuestra
situación financiera y conseguir financiación adicional, al final tenemos que
hacer lo mejor para el negocio”, dijo este lunes el director ejecutivo de
Virgin Orbit, Dan Hart, en un comunicado.
La empresa, que surgió de la compañía de turismo espacial Virgin Galactic, no
ha obtenido nunca beneficios para el grupo Virgin, que incluye también Virgin
Mobile y Virgin Money.
El pasado 9 de enero, un cohete de Virgin Orbit fracasó en su intento de
realizar el primer lanzamiento de un satélite al espacio, desde Newquay, en
el condado inglés de Cornualles.
Durante el proceso de bancarrota, los ejecutivos seguirán tratando de vender la
compañía. “Creemos que el proceso representa el mejor camino para identificar y llevar a
cabo una venta eficiente y que maximice el valor”, añadió Hart.
Mientras tanto, la empresa recibirá casi 32 millones de dólares de Virgin
Investments, también de Branson, para continuar operando mientras busca
comprador.
EFE