La empresa de ciberseguridad CrowdStrike rechazó los alegatos presentados por Delta Airlines, que acusaba a la compañía informática de ser la responsable de la interrupción de un día de vuelos, tras la gigantesca caída del sistema registrado en julio.
El director ejecutivo de Delta Airlines, Ed Bastian, dijo el miércoles 31 que el fallo tecnológico de CrowdStrike —que provocó la caída de Microsoft afectando a aerolíneas, bancos, instituciones, organismos y hospitales— costó a la compañía 500 millones de dólares en cinco días.
En su primera aparición desde el incidente, Bastian afirmó en una entrevista con CNBC que esta cifra incluye la pérdida de ingresos, así como “las decenas de millones de dólares por día en compensaciones y hoteles” durante un período de cinco días. La aerolínea también advierte que 40.000 servidores tuvieron que ser reiniciados manualmente después de la interrupción.
Delta tuvo que cancelar más de 4.000 vuelos en los primeros cuatro días de la crisis, con retrasos para otros miles. Por tanto, según entiende la aerolínea, el incidente da lugar a un reclamo por daños y perjuicios, que es rechazado por la empresa informática.
CrowdStrike, en cambio, afirma que Delta rechazó la asistencia y que la demanda contribuye a una “narrativa engañosa” de que la compañía es responsable de las decisiones del área de tecnología de Delta, según consignó el portal especializado The Verge.
De acuerdo con el citado medio, el abogado de la empresa de ciberseguridad, Michael Carlinsky, señaló en una nota que CrowdStrike “rechaza enérgicamente cualquier alegación de que fue groseramente negligente o cometió una mala conducta intencional”.
“Si Delta sigue por este camino, tendrá que explicar al público, a sus accionistas y, en última instancia, a un jurado, por qué CrowdStrike asumió la responsabilidad de sus acciones de forma rápida, transparente y constructiva, mientras que Delta no lo hizo”, agrega la misiva.
Con información de EFE