Nicolás Jodal, CEO de GeneXus, encabezó este martes la apertura del GX30, el encuentro de GeneXus que reúne a referentes tecnológicos de la región. En esta edición, el centro de las miradas está puesto en la inteligencia artificial (IA), algo sobre lo que el ingeniero referente de la industria tecnológica uruguaya dialogó con Montevideo Portal.
Jodal afirma que “la revolución recién está comenzando” y, por tanto, “todo se mueve”, pero también asegura que con el tiempo la inteligencia artificial tendrá un proceso natural de maduración y, a su vez, distintos procesos de convergencia.
“Cuando comienza una tecnología hay que esperar primero a sus evoluciones, para después entender qué problemas puede tener. Normalmente los miedos iniciales no se cumplen”, dijo al ser consultado sobre el debate público alrededor de la IA.
Jodal también analizó cómo avanza GeneXus en su incorporación a Globant, y visualizó algunos desafíos para la transformación digital del Estado uruguayo. En ese plano, dijo, el próximo mojón debería ser tener una “súper app” que reúna distintos servicios y trámites.
El principal tema de este encuentro GeneXus ha sido la inteligencia artificial. ¿En qué estado se encuentra el avance de esta tecnología y cómo lo trabaja GeneXus?
Es un mundo nuevo. Es una revolución que recién está comenzando. Cuando las revoluciones recién empiezan, la lógica es que es todo arenas movedizas. Todo se mueve. Pero sin duda es una forma de trabajar. Una nueva forma de hacer las cosas que va a terminar redefiniendo cómo es el sistema de acá en adelante y qué sistema es. Las dos cosas a la vez.
¿Detectan por parte de los clientes alguna demanda como principal en relación a este tipo de tecnología?
Lo que hay es interés, curiosidad. Nadie te lo está pidiendo, porque por ahí nadie se imagina una cosa así. Entonces por ahora creo que estamos un poco delante del mercado, es decir que le decimos a los clientes las opciones que hay.
Durante su exposición habló de las revoluciones tecnológicas, lo comparaba con la revolución industrial y hablaba sobre el miedo que puede generar en las personas. Siendo un experto en informática, ¿cómo explica lo que está pasando?
Lo primero respecto al miedo es que creo que hay una enorme confusión, que la generamos nosotros los ingenieros; es que cuando hablamos de inteligencia artificial pensamos que hablamos de cerebro artificial. Y nosotros no estamos haciendo un cerebro artificial. La razón por la cual nosotros no estamos haciendo un cerebro artificial es que no sabemos cómo funciona un cerebro. Esto se llama inteligencia artificial, pero no tiene nada que ver con un cerebro. No va a haber una máquina que piense como un humano. Lo nuevo es una máquina que escribe perfectamente bien.
¿Cómo ve el debate instalado sobre el uso de esta tecnología o las restricciones que debería tener la programación?
Como en toda tecnología que inicia, al principio hay miedos que después no son relevantes; y con el paso del tiempo aparecen los relevantes. Por ejemplo, cuando se inventó el automóvil, la gran duda que había —y había flor de discusión— era si teníamos que pasar los 40 kilómetros por hora, porque decían que el cerebro humano no estaba pensando para más de 40 kilómetros por hora. Decían que nos íbamos a marear, que nos íbamos a desmayar y que los autos iban a chocar. Y no pasó nada de eso. Y después aparecieron los problemas de polución y otros. Cuando comienza una tecnología hay que esperar primero a evoluciones, para después entender qué problemas puede tener. Normalmente los miedos iniciales no se cumplen.
Usted decía que hay varios modelos de lenguaje, pero después hay que ver de todo eso qué es lo que madura. ¿Ese es un poco el proceso? ¿Qué es lo que se espera?
Por ejemplo, OpenAI tiene un modelo, Microsoft tiene otro, Amazon tiene otro, China tiene otro, Arabia Saudita tiene otro. Entonces después van a converger. De la misma manera que cuando empezaron los autos había miles de marcas, y después quedaron algunas.
¿El fuerte de esta tecnología es la productividad? ¿Por dónde está la mejor forma de aprovecharla?
Al principio, lo que tenés es la productividad. Pero después se te van a ocurrir hacer cosas nuevas. Por ejemplo, cuando apareció la televisión, los primeros programas de televisión eran programas de radio con una cámara. Y después salió Gran Hermano, Bailando, o lo que sea. Con el paso del tiempo van a ocurrir cosas nuevas.
Yendo a GeneXus y Globant, ¿cómo está funcionando la alianza tras la adquisición?
Justo hoy estaba hablando de eso con Martín Migoya [CEO y cofundador de Globant]. Llevamos casi dos años trabajando juntos. Ha sido un proceso de integración muy bueno. Y, además, el hecho de esta revolución de inteligencia artificial pone a GeneXus en un rol preponderante en todo lo que es innovación dentro de Globant. La verdad que estamos muy contentos.
A nivel de clientes, ustedes tenían mercados abiertos, por ejemplo, en Japón. ¿Pero han logrado una mayor escala ahora?
Sí, tenemos clientes de Globant a los que antes no llegábamos, y a los que ahora estamos teniendo acceso. Ese es uno de los objetivos iniciales que teníamos y lo estamos concretando.
¿Cómo está viendo el proceso de transformación digital del Estado uruguayo? ¿Hay algún punto en que se podría innovar o en el que visualiza una oportunidad?
Creo que Uruguay tiene siempre la oportunidad de estar adelante. El proceso de transformación digital de Uruguay ha sido bastante importante. Nosotros pusimos nuestro granito con el tema de la aplicación CoronavirusUY. Creo que hay mucho para hacer. Lo siguiente es tener una súper app del Estado uruguayo. Y, después, así como hubo una transformación digital porque el software se estaba comiendo al mundo, ahora la inteligencia artificial se está comiendo al software. Así que la siguiente transformación debería ser hacer un Estado en el que la comunicación con los ciudadanos esté basada en la inteligencia artificial.
Recién hablaba del desafío de una súper app para el Estado. ¿Cómo podría explicar de qué se trataría o qué imagina?
Lo que quiero decir es que en una sola app, que sea GubUy, o se llame como se llame, dónde podés tener tu identidad y tu medio de pago, y donde ahí puedas tanto sacar la cédula, o tener tu pasaporte, hacer cualquier trámite o tener documentos, donde cualquier interacción que hagas con el gobierno de Uruguay esté, a través de esa app, de tal manera que no tengas que moverte.
¿Hoy en día el Estado cuenta con las herramientas para hacerlo o falta todavía?
Falta, pero tiene la base. Una de las cosas buenas de Uruguay es que tiene una muy buena base digital. Entonces, faltan cosas para hacerla pero no estamos nada lejos. Es viable y posible.