El Centro de Panaderos del Uruguay (CIPU) lanzó por segundo año consecutivo su campaña "Pan Dulce Solidario", con la que colaborará con la Fundación Pérez Scremini para continuar curando el cáncer infantil. Con la compra de un pan dulce o un budín inglés artesanal debidamente identificado con los stickers de la campaña se donarán $10 a la fundación. En la primera edición celebrada en el 2019 se recaudaron $200.000.
Desde el 1 de diciembre y con más de 100 puntos de venta a nivel nacional el CIPU y la Fundación Pérez Scremini invitan a los uruguayos a comprar un pan dulce o budín inglés, elaborados en las panaderías de barrio para disfrutar de un producto tradicional en las mesas en fin de año y que tiene la particularidad de que se produce de forma artesanal.
"Tras el éxito de la primera edición y apelando al espíritu solidario de los uruguayos volvemos a lanzar la campaña ‘Pan Dulce Solidario'. El objetivo, al igual que el año pasado, es colaborar con la Pérez Scremini en su noble tarea de curar el cáncer infantil", dijo Álvaro Pena, presidente del CIPU.
A través de la elaboración artesanal se obtiene un pan dulce fresco y auténtico, amasado de la misma manera que cinco siglos atrás en algún lugar de Italia, país al que se atribuye su origen.
"Desde el CIPU buscamos revalorizar la panadería artesanal debido a la calidad de sus productos y la materia prima con las que son elaborados. Este es el gran diferencial de las panaderías artesanales", agregó Pena.
"Como parte de la acción estamos invitando a todos los uruguayos a recomendar su pan dulce y panadería de barrio preferidos a través de las redes sociales bajo el hashtag #PanDulceSolidario", dijo Pena.
En la edición 2019 se vendieron 20.000 pan dulces bajo esta campaña por lo que el objetivo para este año es superar esa meta.