Desde que Coca-Cola llegó a nuestro país en 1943 ha ampliado su abanico de productos y en la actualidad ofrece una variedad de 45 bebidas, buscando adaptarse a la mayor cantidad de preferencias.

Además, ha sumado líneas de trabajo en las que la compañía ha puesto cada vez mayor énfasis, como en la sostenibilidad y el impacto ambiental, algunos de los pilares transversales de su operación.

En el marco de su 80 aniversario, reafirman sus compromisos y redoblan apuestas, con el objetivo de “seguir refrescando al mundo”. Así lo explica a Montevideo Portal Juan Sebastián Jiménez, director de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sustentabilidad para Argentina y Uruguay de Coca-Cola.

Empoderamiento económico: todo empieza con la educación

Desafío Emprender es una iniciativa que busca promover instancias que impulsen a los jóvenes emprendedores, de entre 17 y 24 años, y ofrece espacios de capacitaciones técnicas, así como mentorías de aceleración para apoyar las ideas de negocios que tengan.

En el cierre de esta primera edición, “60 jóvenes nos contaron sus historias de emprendimiento, sus retos, como interactúan, lo difícil que es emprender y la responsabilidad que recae tan fuerte sobre ellos sabiendo que están trazando nuevos caminos para dejar un legado en el país. Ellos ven el emprendedurismo como su camino para ser libres. Tuvimos la maravillosa oportunidad de acompañarlos y darles 60 computadores portátiles como una herramienta más. A su vez, los tres mejores obtuvieron un capital semilla para el desarrollo de su emprendimiento”, explica Juan Sebastián Jiménez.

También han trabajado con mujeres líderes de pequeños comercios y durante la pandemia se enfocaron en ayudar a que este tipo de negocios puedan salir adelante pese a las dificultades del contexto.

Cuidar el agua: un recurso finito

Otra de las líneas de acción tiene que ver con el cuidado y la reducción del consumo de agua. “Vamos a cerrar una alianza en la cual pudimos donar 150.000 dólares a la Cruz Roja para apoyar con 130 purificadores en policlínicas de Canelones y Montevideo. A través de un proceso de ósmosis inversa siempre van a tener agua potable y esto va a beneficiar a cerca de 4.500 personas”, cuenta Jiménez.

En lo que respecta a eficiencia en el uso del recurso hídrico, el agua de uso industrial que tienen en la planta embotelladora en Montevideo es 100% reutilizada en todos los procesos. “Hemos mejorado la ratio de consumo de agua para la producción de las bebidas y también trabajamos en el reabastecimiento de agua, esto es, devolverle al medio ambiente más del 100% del agua que utilizamos en nuestras bebidas a través de protección de cuencas hidrográficas”, añade.

Un ejemplo de esto es el trabajo que Coca-Cola viene realizando desde 2017 en el Valle del Lunarejo, en Rivera. Devuelven el 600% del agua, es decir, por cada litro vuelven a la naturaleza seis litros, protegiendo el ciclo natural. Se logró recuperar 3.000 hectáreas de bosque nativo y mejoró significativamente la infiltración del agua en el suelo hasta cinco veces.

Un mundo sin residuos: economía circular

Coca-Cola a nivel mundial tiene la meta de recolectar el equivalente al 100% de los envases del mercado y ese compromiso se basa en distintas líneas.

“En cuanto a la línea de diseño, en Uruguay en el año 2015 redujimos el 15% de la resina utilizada en la botella del agua Vital. En 2019 lanzamos la primera botella hecha de otras botellas. Al utilizar PET, se le puede dar mucho más de un uso, para convertirse en otra botella o en fibras de tela, por ejemplo, como esta chaqueta que yo tengo puesta”, ejemplifica Juan Sebastián Jiménez,

En 2020 lanzaron la línea de botella única en formato familiar. De esta manera se reduce significativamente el lavado, el llenado y la logística inversa, al tiempo que disminuyen las emisiones de carbono y se pueden rellenar con la misma u otra bebida. Al final de su ciclo de vida útil son recicladas junto con sus etiquetas de papel también 100% reciclables.

Generar conciencia: un trabajo en cadena

En este proceso de reciclaje, una parte fundamental es generar conciencia en la ciudadanía para que los residuos se devuelvan en los lugares correctos. Por eso junto a otras organizaciones de la sociedad civil se unen con campañas como el uso de la app ¿Dónde reciclo?, una plataforma que brinda a los usuarios la geolocalización de los puntos de recepción de materiales reciclables para su posterior transformación.

“El plástico no es el problema, el problema es nuestra cultura de reciclaje, de disposición de los residuos. Tenemos que ayudar en lo que está a nuestro alcance”, expresa a Montevideo Portal Juan Sebastián Jiménez, director de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sustentabilidad para Argentina y Uruguay de Coca-Cola.