En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente celebrado el 5 de junio, Coca-Cola FEMSA, el embotellador de la compañía Coca-Cola en Uruguay, reafirma su compromiso por minimizar el impacto ambiental de sus operaciones a través de las políticas y acciones que desarrolla.

La Estrategia de Sostenibilidad es su principal pilar en la materia y cuenta con tres áreas esenciales: agua, gestionando de manera óptima el consumo de este valioso recurso; energía, aprovechando de forma eficiente su uso en procesos de producción y logística; y residuos y reciclaje, asegurando tener los empaques con el mejor desempeño ambiental y manejando de forma responsable los desechos generados.

En ese sentido, el pasado año a nivel global, Coca-Cola FEMSA logró una relación de uso de agua de 1.52 litros de agua por litro de bebida producida, una mejora del 22.5% con respecto a 2010 y devolvió al medio ambiente más del 100% del agua utilizada en la producción de sus bebidas en Argentina, Brasil, Centroamérica, Colombia y México. Además, incluyó un promedio de 23.7% de resina reciclada en la producción de todas sus presentaciones de PET y recicló el 95,7% de desechos de fabricación generados en todos sus procesos de producción. Asimismo, logró suministrar el 70.7% de los requisitos de electricidad de sus operaciones globales de embotellado con energía de fuentes limpias.

A nivel local, en los últimos cinco años la empresa redujo casi el 30% del consumo de agua en los procesos productivos, mediante la incorporación de líneas de llenado eficientes y nuevas tecnologías. De esta manera, el año pasado alcanzó la meta de utilizar 1,88 litros de agua por cada litro de bebida producida.

Asimismo, el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) reconoció en 2020, y por tercera vez, a Coca-Cola FEMSA Uruguay con el Certificado de Eficiencia Energética. El mismo fue otorgado por la incorporación de la línea 7 de producción de la planta, que permite un importante ahorro de energía eléctrica, así como del nuevo compresor de aire de alta presión adquirido para dicha línea.

En lo referido al reciclaje, la empresa toma en cuenta dos factores respecto a los envases que comercializa: el material y diseño para su producción y su valorización después del uso. En esta línea, el año pasado lanzó junto a la Compañía Coca-Cola el agua sin gas Vitale de 625mL en un envase creado íntegramente a partir de otras botellas recicladas, apuesta que comenzó en 2015 con la botella eco-flex que posee 15% menos de PET.

Por otra parte, junto a la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) y el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) y diversas intendencias, la compañía participa activamente del Plan de Gestión de Envases para potenciar la recolección y reciclaje de los empaques.

Esta filosofía orientada al cuidado de los recursos naturales es compartida y promovida por la firma en todos los niveles, tanto con la comunidad como con sus colaboradores. Algunos ejemplos de esto fueron la jornada de limpieza de costas realizada en la Rambla Costanera de Canelones, a la que se sumaron más de 50 voluntarios, y el taller de concientización sobre reciclaje y disposición de residuos en el hogar destinado a los colaboradores y sus familias.