El consejero delegado de Boeing, Robert “Kelly” Ortberg, anunció este miércoles que, mientras dure la huelga de cerca de 33.000 de sus trabajadores, la dirección de la empresa se reducirá el sueldo y se aplicarán despidos temporales a gran número de ejecutivos, jefes y otro personal para preservar la liquidez.
Su nota interna a los empleados, difundida por medios como CNN, admite que la interrupción de la producción en el noroeste del Pacífico ha hecho que el negocio afronte desafíos de los cuales hay que asegurarse que la empresa será capaz de recuperarse con éxito.
En el marco de ese esfuerzo, según dijo, en los próximos días comenzarán a aplicarse despidos temporales “que afectarán a un gran número de ejecutivos establecidos en Estados Unidos, jefes y empleados”.
Para limitar ese impacto, Boeing prevé que dichos trabajadores tomen una semana de permiso cada cuatro semanas mientras dure la huelga, un tiempo durante el cual conservarán sus beneficios.
Además, añadió, tanto él mismo como el equipo directivo asumirán una reducción proporcional de su salario.
“No tomaremos ninguna medida que inhiba nuestra capacidad de recuperarnos en el futuro. Todas las actividades críticas para nuestra seguridad, calidad, apoyo al cliente y programas de certificación clave tendrán prioridad y continuarán, incluida la producción de los 787”, dijo.
El jefe financiero del fabricante, Brian West, ya había avanzado esta semana la decisión de la empresa de congelar las contrataciones y los viajes de todo el personal no esencial mientras dure la protesta.
La huelga comenzó el pasado viernes y es la primera en la compañía en 16 años. La anterior fue en 2008 y tuvo un seguimiento de más de 50 días que paralizó la producción y le costó a Boeing unos 100 millones de dólares por día, según recuerdan medios como The Wall Street Journal o Financial Times.
Los trabajadores iniciaron esta última protesta tras rechazar el acuerdo entre los sindicatos y el fabricante, que contemplaba un incremento general de los salarios del 25% en cuatros años y que consideran insuficiente.
Los distritos en huelga de la Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales (IAM, por sus siglas en inglés) representan a unos 33.000 empleados de Boeing.
La cadena CNBC News destacó el lunes que la empresa perdió 8.000 millones de dólares en la primera mitad del año por una ralentización en la producción después de un aparatoso accidente en la puerta de un avión que se encontraba en vuelo el pasado febrero, y que tuvo que volver de emergencia a la pista de despegue, sin que hubiera víctimas.
EFE
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