En el marco de la celebración de la Semana Plateada, una iniciativa que buscó destacar la presencia del adulto de 60 años o más en la sociedad y su peso en el mercado, se desarrolló Platea+, una jornada de charlas para conversar sobre la Economía Plateada, de la que AFAP SURA fue patrocinador.

“En Uruguay son casi 700.000 las personas con más de 60 años que tienen necesidades y gustos específicos que no están siendo atendidos por nuestra economía. Representan un segmento de la población que se encuentra activa, con el interés y deseo de realizar actividades y generar vínculos sociales. En este sentido, hablar de Economía Plateada permite visualizar la realidad de esta población, desarrollar líneas de negocios que le den respuestas concretas, y fomentar su integración en el mercado y en la sociedad”, destacó el gerente general de AFAP SURA, Sebastián Peaguda.

El desarrollo de las charlas contó con la participación de seis especialistas de la región que establecieron un panorama de la situación actual en torno a esta temática.

Layla Vallias, especialista en Economía Plateada y coordinadora general de “Tsunami”, el estudio más grande en el mundo sobre la madurez en América Latina, destacó que pese a la fuerza económica que poseen las generaciones plateadas, no son atendidas por bienes y servicios especializados.

Según el estudio del que participó la experta, cuatro de cada diez latinoamericanos de más de 45 años declaran que no hay oferta de productos para ellos, mientras que para la franja de más de 65 años, cinco de cada diez alegan ser excluidos por las marcas.

“Las exigencias de esta franja de la población no se limitan únicamente a la necesidad de servicios de cuidados, sino que requieren productos y servicios que abarcan desde el bienestar sexual y la salud  mental hasta la gestión financiera”, expresó.

Por su parte, el ex presidente del Banco de Previsión Social y de la Comisión de Expertos en Seguridad Social, Rodolfo Saldain, destacó que la masificación de la longevidad es lo que favorece a tener actualmente un panorama demográfico desconocido y que representa un desafío para la sociedad.

Agregó que este fenómeno generó un cambio en la forma de pensar el desarrollo de la vida.

“Ya no contamos con una vida con tres etapas bien marcadas, que son el estudio, lo laboral y el retiro. Ahora la vida es más larga para la mayor cantidad de personas, con muchos matices y periodos de  educación metidos en el medio y en el final de la vida laboral”, explicó.

En tanto, Inés Castro Almeyra y Miriam de Paoli, emprendedoras de Nau Experiencias- plataforma de entretenimiento para personas mayores- y de No Pausa, una organización con foco en visibilizar la etapa del climaterio, respectivamente, profundizaron en las necesidades que sus líneas de negocios buscan satisfacer para esta población.

Por otra parte, Diego Sastre cofundador de Pyxis, destacó la propuesta que llevó dentro de su empresa con el programa +50, una iniciativa que apuntó a ofrecer una nueva inserción laboral a las personas relegadas del mercado. 

Para finalizar, el presidente de la fundación Astur, Enrique Iglesias, destacó la longevidad como oportunidad y el valor de la personas mayores como un importante recurso para la sociedad. 

“No solo se trata del valor en términos de capacidad de consumo, sino en cuanto al aporte de esta población puede brindar a la sociedad del futuro. Hay que cambiar el enfoque de la longevidad como problema para verla como una oportunidad en donde los mayores estén incluidos en la sociedad y puedan seguir contribuyendo con sus experiencias”, concluyó