Tres meses después de su aprobación, la reforma del sistema previsional comenzó a tener efectos este 1º de agosto. El programa radial En perspectiva ahondó sobre uno en particular, el que regula la jubilación activa, la posibilidad de que un trabajador del sector privado vuelva a trabajar después de jubilarse y cobrando la pasividad, y el retiro parcial flexible, que permite que a la persona que con causal jubilatoria acuerde con su empleador la continuidad en el trabajo y reduzca, al menos, en una tercera parte la carga horaria y la remuneración correspondiente.

¿Cómo funcionan estas alternativas? El presidente del directorio del Banco de Previsión Social (BPS), Alfredo Cabrera, considera que este nuevo decreto garantiza “un nuevo derecho”, porque “es lo que se consagra, no es una obligación”. Además, dijo que se relaciona con un concepto que resuena en el mundo: el envejecimiento activo. “Hay una actividad de la tercera edad que existe y me parece válido que sea reconocida”, agregó.

Para el jerarca, es evidente que hay personas jubiladas que tienen la “voluntad de trabajar” y “hoy muchas de esas tal vez lo están haciendo fuera del mercado formal”. Por lo que, consideró, el régimen facilitará la regularización.

En lo que respecta a los cambios que implican los nuevos decretos, Cabrera destacó que esta posibilidad no existía en los sectores de Industria y Comercio, Rural y Doméstico.

Entonces, tras el decreto, la persona jubilada de estos sectores podrá seguir trabajando en el mismo rubro.

Machado planteó cuatro opciones en tres hipótesis diferentes para explicar, a grandes rasgos, los nuevos cambios: el caso de un jubilado activo, un activo dependiente y un activo no dependiente.

Persona jubilada

Una persona que hoy está jubilada de Industria y Comercio puede volver a trabajar, explicó. Siempre en el caso de que tenga una “jubilación común”: “Si es por incapacidad, no puede”, mencionó.

En este escenario, una persona jubilada podrá recibir una oferta de trabajo; la empresa deberá incorporarla a su planilla. La única condición del BPS será controlar que la persona esté en regla para ingresar. La persona cobrará su jubilación y, además, tendrá las prestaciones de la actividad, excepto el seguro de desempleo.

Trabajadores activos dependientes

Este caso implica a las personas que tienen un trabajo, las condiciones para jubilarse y optan por un retiro parcial flexible. Si optan por este camino, podrán reducir su jornada de trabajo un tercio o a la mitad, en acuerdo con su empleador. Para Cabrera, es una modalidad “súper interesante para generar el recambio generacional en las empresas”.

Otro caso que está habilitado para trabajadores dependientes es jubilarse y volver a trabajar en otra empresa, en la misma o en el mismo grupo económico. En el caso de conservar el mismo empleador, deberá esperar seis meses, ya que no podrá continuar de inmediato en la misma empresa.

Trabajadores activos no dependientes

Una persona que cuenta con múltiples empleos, si tiene las condiciones necesarias para jubilarse, podrá hacerlo por uno de ellos y conservar los otros que tenga.