La reforma del sistema de jubilaciones y pensiones impulsada por el Gobierno, que en diciembre tuvo media sanción en el Senado, está discutiéndose actualmente en Comisión de la Cámara de Diputados.
Esa comisión retomó su actividad este martes luego del receso de semana de Carnaval. Con el regreso al trabajo reaparecieron las diferencias entre Cabildo Abierto y los otros partidos del oficialismo en torno al proyecto.
El diputado de Cabildo Abierto Álvaro Perrone pidió ayer que la votación del texto se postergue hasta después de la aprobación de la Rendición de Cuentas.
La idea, según señaló hablando con el diario El País, es que una vez que la Comisión termine de recibir a las delegaciones que concurran a opinar sobre el tema, cada partido pueda seguir recabando información, estudiar en forma detenida la documentación que se haya entregado y hacer las consultas del caso. “Se trata de tener más tiempo para tomar decisiones”, señaló Perrone.
“Si apretamos antes la decisión, tal vez esa decisión no sea la correcta”, dijo.
Perrone entiende que, así como está redactada hasta ahora, la reforma provocará una baja en la mayoría de las jubilaciones, por lo que es reticente a votarla.
Por otro lado, el Frente Amplio (FA) propuso que se contrate a una consultora independiente para que realice una evaluación “imparcial” de los efectos del proyecto, fundamentalmente en las futuras pasividades. La coalición de gobierno pidió más tiempo para resolver si apoya esa solicitud.
Este miércoles, los conductores de En perspectiva Emiliano Cotelo y Romina Andrioli conversaron sobre estas novedades con el diputado del Frente Amplio Gustavo Olmos.
El legislador aclaró en primer término que, si bien el Frente Amplio entiende la necesidad de una reforma de la seguridad social, “las criticas son porque se trata de una reforma parcial que solamente se ocupa de una parte del sistema: las jubilaciones y las pensiones”.
“Además, el costo que tiene recae básicamente sobre los trabajadores”, afirmó Olmos.
Sobre la propuesta de contratar una consultora independiente que analice el proyecto, Olmos mencionó que el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, “dice todos los días que las jubilaciones no van a caer e incluso habla de un aumento de entre el 18 y el 20% para 2043 en caso de aplicarse la reforma”.
“Por otro lado, el Instituto Cuesta Duarte hace sus cuentas y señala que una persona que se jubila con 60 años con $ 36.700, cuando se jubile con 65 años lo va a hacer con $ 28.400. Es un 23% menos cinco años después. Cuando le plantemos esto al Gobierno, la respuesta de Rodolfo Saldain fue que la evaluación del Cuesta Duarte tienen un sesgo determinado, por los casos que se tomaron para el análisis. Con relación a diferencias existentes con respecto al Centro de Investigaciones Económicas [Cinve], Saldain manifestó que las diferencias son metodológicas”, detalló Olmos.
En esta línea, el representante manifestó que lo que propone el Frente Amplio es que una consultora analice cuál es la metodología utilizada por el Cuesta Duarte, Cinve y por el Gobierno.
“No estamos pidiendo que haga todo el cálculo, sino que la idea es que el Parlamento tenga un asesoramiento sobre las metodologías utilizadas. Saber qué estamos comparando”, explicó Olmos.