El Poder Ejecutivo habilitó las prácticas deportivas en gimnasios cerrados a partir del próximo lunes 24 de mayo, con aforo máximo de 30% y sin el uso de vestuarios.
Según un comunicado de la Secretaría Nacional del Deporte, los entrenamientos y prácticas deportivas al aire libre no estarán sujetas a restricciones, pero se mantiene la prohibición del uso de vestuarios.
Esta medida no comprende a competencias oficiales, que seguirán inhabilitadas a menos que haya expresa excepción de parte de esa secretaría. ¿Cómo se preparan para este regreso?
Sobre ese tema versó la entrevista realizada este viernes en el programa En Perspectiva, emitido por Radiomundo, al subsecretario nacional de Deporte, Pablo Ferrari.
Durante el reportaje, el jerarca destacó "la importancia que el Poder Ejecutivo, desde el presidente hasta la Secretaría, le da al deporte", actividad que se considera de relevancia "no sólo desde el punto de vista competitivo o de la actividad física, sino también como promotor de salud". En ese sentido, recordó que las restricciones dispuestas el pasado 23 de marzo "se tomaron con mucha pena, porque se sabía que podían traer otros perjuicios. De hecho, hay estudios que indican que la mortalidad de la covid aumenta con el sedentarismo, con la falta de actividad física".
En cuanto al momento en que se resuelve esta apertura parcial, reconoció que si bien llega en un momento en que la circulación del coronavirus todavía es alta, "se esperó a que hubiera una mayor cantidad de vacunados, algo que ocurrió este mes".
Ese aumento en el porcentaje de personas inmunizadas "nos permite volver a una actividad que está bastante protocolizada, hay un control de los clubes y gimnasios, aunque no en su totalidad, por eso tuvimos que tomar medidas" adicionales, como por ejemplo "la obligatoriedad de un registro ante la Secretaría Nacional del Deporte".
De acuerdo con ese cambio, los propietarios de las instituciones acceden vía web a un registro donde "además de ingresar todos los datos de la empresa, deben designar un fiscal de cumplimiento", que será el interlocutor con las autoridades en cuanto a la debida observación de las medidas.
"Quienes no se inscriban antes del lunes van a estar en infracción" y serán pasibles de sanciones, "porque esto pasa a ser una exigencia sanitaria: lo del oficial antes era una premisa, ahora es una condición", remarcó.
Respecto al registro de usuarios, Ferrari señaló que "la mayoría de las instituciones que estaban haciendo las cosas bien, ya lo tenían, y de hecho habían habilitado modalidades de registro en sus páginas web". En contrapartida, "hay otros que lamentablemente no tienen la capacidad económica para llevar una web o un registro electrónico como algunos grandes clubes". Sin embargo, esa carencia no los eximirá de la obligación. "Van a tener que hacer un registro como puedan" aunque sea de forma manual, "anotar a las personas con sus teléfonos, y horarios de entrada y salida", algo que "muchas instituciones chicas ya venían haciendo, pero que ahora será obligatorio". Idéntica situación se produce con el aforo del 30 %: "si les cae una inspección, por más registrados que estén, tienen que cumplir el aforo".
En cuanto a las piscinas, se habilitarán "sólo para uso terapéutico y para las rehabilitaciones, hay que entender que hay muchas personas mayores que lo necesitan, así como los convalecientes de lesiones.", interrogado al respecto, el funcionario distinguió entre hidroterapia e hidrogimnasia, y aclaró que la primera está habilitada, pero la segunda no.
Entrevista adelante se refirió a las canchas de fútbol 5, y recordó que las hay de diferentes tipos. Las más "complicadas" son las completamente cerradas. En ese caso, sólo podrán estar dentro los jugadores, y si hay gente a la espera deberá aguardar afuera.
Para evitar abundar en la variadísima casuística de los numerosos deportes que se practican en el Uruguay, Ferrari resumió la situación de la siguiente manera: "Todo lo que es al aire libre, no competitivo, sin aglomeración y sin uso de vestuarios, está permitido".
Consultado acerca del fútbol profesional, que retornó hace ya tiempo a la actividad competitiva, el funcionario expresó que "tiene un protocolo muy diferente, porque exige hisopados varios y en gran cantidad" y un sistema de burbuja muy exigente, algo que supone un elevado gasto "que no le podemos pedir a un club de barrio".