La precandidata del Partido Nacional Laura Raffo está recorriendo el país hace meses con vistas a las elecciones internas que tendrán lugar en junio de 2024, instancia en la que competirá con Jorge Gandini y seguramente con el actual secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, por ahora las precandidaturas confirmadas dentro de dicha colectividad política.    

La economista está trabajando con un equipo de técnicos en el diseño de propuestas programáticas. Por ejemplo, ha mencionado iniciativas para bajar el costo de vida. Además, pone énfasis en seguridad pública, impulsando la habilitación de los allanamientos nocturnos y la incorporación de soldados a la Guardia Republicana.

Este miércoles, el conductor de En perspectiva Emiliano Cotelo conversó con Raffo para profundizar sobre su candidatura y sus posiciones sobre varios temas.

La dirigente creó como plataforma política la agrupación Sumar, espacio que integran Alianza Nacional, el Movimiento Nacional de Rocha, el Herrerismo y blancos independientes.

Raffo afirmó que en el Partido Nacional hay acuerdo en que el “modelo que inició Luis Lacalle Pou y su equipo trae más oportunidades a los uruguayos y se quiere continuar”.

Sobre sus diferencias con los demás candidatos, Raffo dijo que una de las que tiene es sobre el “acercamiento a las personas”.

“El estilo de conducción, la forma de liderar, la capacidad de escuchar. El acercamiento a la gente es distinto en cada candidato o candidata. Y las personas, al final del día, votan con las emociones. Por supuesto que las propuestas son muy importantes y las ponemos arriba de la mesa. Yo tengo un perfil profesional muy marcado que hace que le dé extrema importancia a los equipos técnicos, pero también la manera de ser, la cercanía, la firmeza para tomar decisiones, el ponerte en los zapatos de la gente, son las cuestiones que se evalúan a la hora de darle un voto a alguien”, afirmó.

La economista destacó, además, que “aunque en cinco años no se puede hacer todo”, el actual gobierno logró “transformar el Uruguay, recuperar el clima de negocios para que lleguen inversiones y se cree empleo”.

“Se lograron hacer dos reformas sustanciales como son la educativa y la de la seguridad social. Se puso en marcha un ciclo de transformaciones que hay que continuar, y no nos da temor decir que hay cosas todavía por hacer”, apuntó.

En esta línea, la dirigente opinó que el gobierno “hizo un trabajo excepcional en el control de la inflación”.

“La inflación hoy está en mínimos de 18 años. Pero cualquier uruguayo sabe que Uruguay es un país caro en términos comparativos. Es algo que se arrastra desde hace años, no es responsabilidad de este gobierno. Es un tema económico estructural. Es cara en Uruguay la pasta de dientes, tomarse un café; es caro alquilar. Es un país estructuralmente caro”, dijo Raffo, y añadió que trabaja junto con un conjunto de economistas para identificar las razones del porqué Uruguay es caro.

Según la economista, el problema radica en la formación de precios, y “eso es lo que quiere atacar, porque el costo de vida para los uruguayos hace a sus oportunidades”.

“Esa baja del costo de vida pasa por varios factores. Hemos detectado en conversaciones con los comerciantes, las micro, pequeñas y medianas empresas, que existen en el país una serie de certificaciones, tasas, registros y controles que hacen que el hacer negocios en Uruguay para un pequeño comerciante tenga un peso muy grande del costo estatal. Esa burocracia estatal termina reflejándose no solo en el margen que gana el comerciante, sino que también pesa en el precio final que paga el consumidor”, afirmó.

En esta línea, dijo que “uno de los factores relevantes para bajar el costo de vida pasa por una modernización y simplificación de la burocracia estatal”.

La dirigente ejemplificó que la pasta de dientes y el shampoo salen cinco veces menos en Argentina.

“Tiene que ver con todos estos procesos que hay para la importación y la certificación de productos. Para importar una pasta de dientes, uno tiene que tener frente al Ministerio de Salud Pública [MSP] el registro del producto desde fábrica. La ficha original de registro de ese producto, a la que acceden mayoritariamente las compañías originales fabricantes y no el pequeño supermercado de Paysandú que lo quiere comprar en Colón. Esas barreras para que los pequeños comerciantes en la frontera puedan importar, hacen a esa diferencia de precio tan grande. La burocracia estatal se suma a las barreras para la importación y a la imposibilidad de competir. Son grandes las diferencias de precios y se pueden achicar”, afirmó Raffo.

Consultada por las razones de por qué este tipo de iniciativas no han sido llevadas adelante por el actual gobierno, la economista respondió que se ha empezado a hacer relevamientos por parte del Ministerio de Economía “que impiden la libre competencia y repercuten en el bolsillo de los uruguayos”.

“No se ha podido terminar de hacer. El gobierno tuvo como prioridad el control de la pandemia, el control de la inflación por la guerra Rusia-Ucrania, el sobrellevar la sequía y aprobar dos reformas fundamentales”, justificó.

“Esta es la próxima reforma, y nos parece que este gobierno deja un primer escalón de reformas sin el cual sería imposible pensar en una segunda etapa de transformaciones. Me fijo en todo lo que se hizo hasta ahora, y a partir de ahí la segunda etapa en la que podemos avanzar”, añadió.