Ricardo Pascale, contador público, economista y expresidente del Banco Central del Uruguay (BCU), habló este viernes sobre su nuevo libro El Uruguay que nos debemos, en el que establece como problema central la “divergencia” del país.
“Nos vamos alejando en términos de producto per cápita de los países que fueron nuestros referentes o que tienen nuestros apellidos, de donde venimos casi todos nosotros”, dijo en entrevista con En perspectiva.
En ese sentido, explicó que esto “significa menores niveles de vida, menores oportunidades”. “Yo cuando me gradué estaba lleno de oportunidades”, comentó.
El economista afirmó que “no hay una política clara de crecimiento a largo plazo”, sino que hay “esfuerzos aislados”, y puntualizó que Uruguay tiene “una fuertísima aversión al riesgo”.
Pascale es doctor en Sociedad de la Información y del Conocimiento, y fue dos veces presidente del BCU, entre 1985 y 1990, y entre 1995 y 1996.
También destacó que algunos indicadores demográficos, como los altos niveles de suicidio en jóvenes, quieren decir que “Uruguay ha ajustado por población”.
“El ajuste uno lo asocia a bajar el gasto, el del corto plazo, de las cuentas fiscales. El ajuste por población es el que saca población del país, no a propósito. Se nos van los talentos”, sostuvo Pascale.
Además, aseguró que Uruguay está “en la trampa del ingreso medio”, una idea que expone en el libro. “El país, trabajando sobre producciones estandarizadas, no es competitivo porque sus costos son muy altos”, mencionó. Al respecto, indicó que las empresas que vienen lo hacen porque “se les saca todo; si no, no vienen”, en referencia a exoneraciones impositivas.
“Uruguay tiene que converger, empezar a crecer más que los países desarrollados”, dijo, y apuntó que “el Mercosur no ha dado el resultado querido”.