En el proyecto de Rendición de Cuentas, el gobierno incluyó cambios importantes para el sector audiovisual uruguayo, un rubro que viene en franco crecimiento y que incluso tuvo un auge durante la emergencia sanitaria.

Se crea la Agencia Nacional Uruguay Audiovisual (ANUA), una persona jurídica de derecho público no estatal que se encargará de gestionar los programas de incentivo. Esta agencia sustituye al Instituto Nacional del Cine y el Audiovisual del Uruguay (ICAU) que funcionaba desde 2008 en la órbita del Ministerio de Educación y Cultura.

Dicha reforma descolocó a varias asociaciones del sector, que han dicho que ven en esta nueva agencia la intención de beneficiar a producciones extranjeras en detrimento de la generación de contenido cultural local.

Sobre por qué se impulsa este giro desde el gobierno y qué impacto se procura en el sector audiovisual habló la directora Nacional de Cultura en el Ministerio de Educación y Cultura, Mariana Wainstein.

La jerarca mencionó que el sector audiovisual trabajó con mucho “vértigo” y a “pasos acelerados” incluso durante la emergencia sanitaria “donde vinieron muchos rodajes” y el cine nacional también se vio beneficiado por eso y por producciones nacionales “que surgieron como nunca antes”.

En este marco, valoró que es un “buen momento” para seguir “evolucionando”, buscar nuevos caminos y avanzar en el apoyo al sector, “en el apoyo al cine nacional y también a todo el aspecto industrial que tiene el cine”, agregó y apuntó que “sin lugar a dudas” tiene un aspecto artístico y otro industrial.

Asimismo, se refirió a los “aspectos del apoyo al cine” en instituciones: “Hay apoyos en el MEC a través del ICAU, pero también hay apoyos en Uruguay 21, hay apoyos en Dinatel del Ministerio de Industrias, Energía y Minería; hay en este momento como 10 llamados públicos”.

“El hecho de que haya podido entrar un artículo en la Rendición de Cuentas, es muy beneficioso para avanzar porque todos sabemos los ritmos que tiene la gestión pública y es realmente una oportunidad”, consideró.

No obstante, dijo que entiende que los cambios “muchas veces generan resistencias” pero remarcó que “hay que ver la oportunidad que esto que esto presenta el país”.

La ANUA busca “centralizar”, algo que con el ICAU no ocurría.

“No terminaba de ocurrir, no terminaba de cuajar esa idea de que aquí está la centralización, la coordinación de todo el ecosistema. Son muchas cosas, muchos llamados, muchos temas y la verdad que se pongan de acuerdo el Ministerio de Educación y Cultura con el Ministerio de Industria y con el Ministerio de Economía y Finanzas para crear esta agencia es muy positivo”, expresó.

Sobre la figura de persona jurídica de derecho público no estatal que se le otorga a esta agencia, Wainstein explicó que “es la manera, desde el punto de vista jurídico, de crear una institución que pueda coordinar a toda esta actividad”.

Agregó que no es el primer caso en el país. “Está la Agencia Nacional de Investigación e Innovación, está la Agencia de Evaluación”, ejemplificó y acotó que “hay varias instituciones que manejan temas y centralizan el aporte, el esfuerzo de varios ministerios”.

“Es más rápido, tiene otra velocidad que la verdad que el sector del cine lo está necesitando”, sintetizó.

“La agencia va a facilitar, va a simplificar; lo que se necesita en este momento es eficiencia, velocidad también”, remarcó y señaló que va a “simplificar todos los procesos”.

“Le va a dar una velocidad que en este momento si la tiene es por un esfuerzo sobrehumano de todos los implicados para llegar a tiempo y aun así muchas veces está por fuera del esfuerzo de los que están implicados que todo llegue a tiempo, que el dinero entre cuando tiene que entrar en fecha, cosas que los productores necesitan”, relató.

Según consignó la jerarca, “protege y ayuda al desarrollo del cine nacional y también del videojuego, de la animación y de todo lo que hoy en día está en ese mundo audiovisual y que es trabajo, que es empleo para mucha gente”.