Esta semana el Ministerio del Interior concluyó que no hubo excesos en el procedimiento llevado a cabo por la Policía el domingo 1 de noviembre en la Plaza Líber Seregni.

La cartera divulgó este martes un video que resume aquel procedimiento con filmaciones y fotos y explicó por qué se detuvo a 11 personas aquella noche, cuando tres efectivos resultaron lesionados.

Mientras tanto, la Fiscalía continúa su propia pesquisa, teniendo a esos tres efectivos como denunciantes.

¿Cómo viven los policías este tipo de situaciones? ¿Qué dice el gremio que los representa? ¿Cuál es la forma de proceder en casos de aglomeraciones incompatibles con la emergencia sanitaria? En la mañana de este jueves el periodista Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo, lo dialogó con el abogado del Sindicato de Policías de Montevideo (Sifpom), Andrés Ojeda.

"El episodio de la Seregni puso de manifiesto que hay un grupo social muy antipolicía desde lo ideológico, también puso de manifiesto que la enorme y abrumadora mayoría de la población respalda el accionar policial, en la medida que no sea algo estridentemente negativo", comenzó Ojeda, y "descartó por ridícula" algunas acusaciones de grupos sociales.

Por ejemplo, el bloque antirracista se expresó horas después del hecho diciendo que se había tratado de un procedimiento "racista, autoritario y violento".

"No salgo de mi sorpresa por el tipo de declaraciones como las del bloque antirracista. Los que dirigieron el operativo en la Seregni son afrodescendientes, parece hasta irónica y paradójica la acusación por racismo", dijo.

"Fíjese usted el ruido que hubo alrededor de todo esto y cuando le pasamos el colador, no hay una sola denuncia formalizada en la Fiscalía contra el procedimiento policial, ni una. Lo único que hay en la Fiscalía presentado con nombre, apellido y firma son las tres denuncias de los policías que fueron agredidos y lastimados", señaló

"Cuando a todo esto le pasamos el filtro del ruido público en el marco de un referéndum de la LUC y la discusión de seguridad pública como bastión electoral político, el único que queda de rehén es el policía que está en el operativo", prosiguió, y dijo que "solamente en Uruguay se habla de brutalidad y represión policial en un operativo que no tiene ni un solo herido, salvo 3 policías". "Es de locos", sentenció.

Consultado por Cotelo sobre por qué, tal como él señala, se agrede a la policía, y Ojeda señaló que hay "un componente de fondo que no tiene nada que ver con la pandemia".

"La gente agredía y agrede hoy, con y sin pandemia. No es nuevo que algunos sectores o grupos agredan a la policía. Hay gente que no quiere a la policía, no la respeta y cree que no debería existir. Mucha gente y algunos grupos, incluso los firmantes de estas declaraciones, tienen reminiscencias de épocas de dictadura y un policía de 20 años no debería estar cargando con lo que pasó hace 40 años".

De todas formas, indicó que se trata de un grupo pequeño de la población, y recordó que ese fin de semana hubo 350 operativos de exhortación y "no hubo ningún problema" más que en la Plaza Seregni.

Protocolo ante aglomeraciones

Ojeda también aclaró que Patricia Rodríguez, la presidenta del sindicato, "no le reclamó un protocolo al ministerio para los operativos". "Lo que dijo fue que se viene el verano, que presenta otras condiciones y que quizás podríamos adelantarnos e ir previendo alguna cuestión específica", dijo.

El abogado aseguró que el protocolo de accionar policial ante aglomeraciones "no tiene ningún competen represivo": "No dice baje y llévese detenidos al que no tiene un tapaboca. Es la misma exhortación a libertad responsable que tenemos desde marzo. Aquí no ha cambiado nada. Se lee por altoparlante, al que no cumpla con lo que se dice se baja a comunciarle, si no quiere cumplir por ninguna razón se da cuenta a la Fiscalía.

Consultado por Cotelo qué sucede en caso de que las personas no acaten, Ojeda señaló que "el que decide es el fiscal".

"No he visto ninguna o casi ninguna detención por incumplimiento de medidas sanitarias en el marco de la exhortación. Si la Fiscalía entiende que hubo desacato de la orden policial puede tomar una decisión, pero es una decisión de la Fiscalía, al policía solo le dicen si trae personas para indagar o no. En los únicos casos donde he visto indagatorias es cuando hay agresiones, que estamos ante otros delitos que no es desacatado".

Con respecto a lo ocurrido en la plaza Seregni, el abogado dijo que "antes de llegar a hablar con nadie ya aparecieron las botellas y los insultos".

"Cuando pasó el altoparlante ya había insultos, cuando se bajaron empezaron las botellas y unos pocos agredieron a la policía. Ya no hablamos de desacato, es atentado", señaló.

Actores políticos "con manija antipolícía"

Cotelo consultó a Ojeda sobre las declaraciones de Gustavo Leal, exdirector de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior en el programa En Perspectiva. Leal, entre otras cosas, dijo que había órdenes internas de la Policía que le han enmendado la plana al ministro Larrañaga luego de que este se catalogara "hincha de la Policía" e "incentivara" a acciones que no corresponden.

"Hay un sector de actores políticos y sociales que están con un grado de manija enorme antipolicia. Me sorprende que personas que estuvieron dentro del Ministerio del Interior, estén hoy en esta manija antipolicía. Cuando pasamos el colador, no queda nada, esto es puro ruido y es responsabilidad nuestra romper con los relatos", dijo Ojeda.

"No me consta nada de la información interna de pasillo que dice que tiene o no tiene, no me voy a poner a discutir públicamente con Gustavo Leal, me tiene sin cuidado. La realidad es la realidad, es la que palpamos y tocamos, las denuncias, si hubo abusos, que se hagan y si hubo reales abusos, que se castigue, pero cuando pasamos raya esos abusos no están y no existen, son puro ruido", agregó.

Además, el entrevistado dijo que "esta manija" tiene "un grado de irresponsabilidad enorme" y que "va a terminar provocando un lío con resultados que se van a tener que arrepentir".

"Mañana con tanta manija que dan contra la policía, se está envalentonado muchas personas a enfrentar a la policía indirectamente. Si mañana se produce un enfrentamiento y termina con un lesionado, un herido, un muerto, ¿De quién va a ser la culpa?. El que tiene un micrófono tiene responsabilidades en su discurso. No todo vale por juntar un voto contra la LUC. La vida de la policía y de la gente está antes que los intereses electorales de un grupo y de otro", dijo.

"Este lío lo empezamos a tener, y no es casualidad ni algo fortuito, cuando se anuncia que viene el referéndum contra la LUC, que tiene un bloque de seguridad de 100 artículos de los más cuestionados. Automáticamente se empiezan a inflar estos episodios", dijo, e insistió en que hay "un montón de actores de opinión pública" que generan "un relato sostenido de abuso policial".

¿Cuándo hay una aglomeración?

Cotelo consultó también en que momento se puede catalogar una situación como aglomeración. Al respecto, Ojeda dijo que "es completamente irrelevante" el número de personas.

"La consecuencia que el protocolo prevé no es sancionatoria entonces nunca es demasiado exhortar. ¿Cuál es el problema en que les lean una exhortación por alto parlante a 1 a 2 a 10 o a 50? ¿Le va a venir mal? Sería relevante si se toman actitudes de limitación de derechos, entonces hay que definir que es aglomeración por ley. Ahora, ¿Para leer por altoparlante las medidas de seguridad preciso definir cuánta gente es? No es muy importante cuánta gente es una aglomeración", expresó.

Propuesta de que personal de la salud participe en las exhortaciones

El sindicalista Richard Read propuso en los últimos días que el personal de la salud acompañe en los operativos policiales para exhortar a las personas a no aglomerarse.

Consultado sobre esta propuesta, Ojeada dijo que "cree en la buena fe de Read en trata de sumar" pero que hay "cuestiones operativas" que complicarían esa iniciativa.

"Salud pública está con sus recursos utilizados en prioridades en otras cosas, poner personal de la salud a recorrer las calles teniendo a la policía para poder hacerlo parece complejo. Creo en la buena fe de la propuesta, francamente la veo poco viable", manifestó.