En el inicio de la campaña electoral, la seguridad pública está instalada, otra vez, como uno de los principales temas de debate político.
El gobierno resalta la baja en las rapiñas, los hurtos, el abigeato y los homicidios en la comparación con 2019. Sin embargo, el presidente Luis Lacalle Pou remarca una y otra vez que no está conforme con los resultados y los niveles de violencia instalados en la sociedad.
Del lado del Frente Amplio (FA) se afirma que el gobierno pinta un panorama que se da de bruces con la realidad. Para varios dirigentes de la oposición, se mantienen los mismos problemas que hace cuatro años, principalmente en relación a los homicidios.
En medio de esta polémica, el Ministerio del Interior, que desde noviembre del año pasado dirige Nicolás Martinelli, está implementando una “estrategia dual” de combate al delito que implica combinar estrategias de represión, disuasión y prevención.
A eso se le suma la incorporación de nueva tecnología, y el despliegue de fuerzas de choque y equipos especializados de la Policía en barrios donde se constatan disputas territoriales entre narcotraficantes.
Para profundizar en esta etapa de la gestión del Ministerio del Interior, En perspectiva entrevistó a su titular, Nicolás Martinelli.
Martinelli aboga por el “enfoque dual” como base de su política de gestión al frente de la cartera encargada de la seguridad interna, y dijo: “Si vos no trabajás en los dos niveles por igual, en el de la represión y en el de las causas, lo que va a pasar es lo que le pasó al Frente Amplio, se disparan los delitos”.
“Se disparan de forma abrupta, no lo que había pasado en el período anterior, que había un crecimiento, pero moderado. Acá tengo para mostrar, los homicidios, entre 2005 y 2019, crecen un 108%. Las rapiñas crecen un 240%. Los hurtos cerca de un 30%, lo mismo que el abigeato. ¿Y por qué pasa eso? Porque dejaron de lado la pata de la represión. ¿Y cuál es la importancia de esa pata? Que ayuda a contener el delito”, dijo el ministro.
“Sin represión, no podés contener el delito; y sin trabajar en las causas, no podés ayudar a una baja sostenida”, afirmó Martinelli.
El ministro dijo que “la realidad indica que el Frente Amplio no trabajó como debió en materia de represión” y que por eso se dieron los aumentos de los distintos delitos. Además, señaló, durante las gestiones pasadas se “trabajó muy tímidamente en el tema de las causas, si bien era la bandera que el Frente Amplio tenía”.
“Que, a ver, yo comparto [esa bandera], pero no lo hizo de la forma que debe hacerse”, sostuvo.
“Un ejemplo: la liberación de presos en el año 2007. Liberan presos sin tener un estudio sobre reincidencia en materia carcelaria. Estudio que sí hizo este gobierno hace pocos meses atrás y que fue presentado. Por lo tanto, el FA en aquel momento libera presos al azar, sin tener algo de respaldo académico atrás, de cuáles son los presos que más reinciden, cuáles son aquellas edades o franjas etarias que, en definitiva, te permitiría liberar presos sin tener que llegar al círculo vicioso de la reincidencia”, apuntó.
Martinelli expresó que al haberse liberado presos “de esa forma, sin estudios académicos atrás”, la mayoría volvió a reincidir, lo que “tuvo un impacto directo en el aumento de los delitos”.
“Este gobierno ahora tiene un estudio sobre las reincidencias que le permite trabajar en políticas focalizadas sobre eso. Uno de los programas que nos permite este estudio sobre la reincidencia es el que se está llevando ahora en el Comcar, el programa del kit de bienvenida que está dando el Ministerio de Desarrollo Social [Mides] a 500 reclusos, porque es un plan piloto que dura seis meses, que egresa del Comcar y que se van a su casa, no con una mano atrás y otra adelante: se van con una tarjeta que les permite hacer compras para alimentos y bienes básicos de higiene, y otra con boletos”, indicó el secretario de Estado.
“Además, tiene un acompañamiento durante esos seis meses, porque tiene que concurrir a la Dirección Nacional de Apoyo al Liberado [Dinali], porque se lo está citando para darle, dentro de la red de oportunidades que tiene el Mides y otros ministerios, oportunidades de trabajo, de estudio. Toda esa red de contención no existía en aquel momento. Entonces era natural que el abordaje que se hizo, si bien tenía una buena intención, no tenía atrás la espalda, la estructura necesaria, como para poder realmente trabajar en las causas”, afirmó.
Consultado por los saludos desde la oposición a su enfoque dual y las críticas de que no se haya implementado antes, Martinelli dijo que, “en definitiva”, fue Jorge Larrañaga el que “lo empezó a trabajar”, señalando como ejemplo el Plan Dignidad.
“[En] la gestión de Larrañaga se instaló la primera oficina territorial del Mides en el Comcar. Hecho histórico, el Mides se instalaba en el sistema penitenciario nacional. Eso no es menor. Son señales, hechos que evidentemente tienen su inicio con este período de gobierno, lo que yo hice, lo que iniciamos con [Luis Alberto] Heber, que le di un marco y una impronta más fuerte, tiene que ver con esto que decía, darle ese marco de la estrategia de enfoque dual”, manifestó.
“Los países nórdicos tienen mucho trabajo en materia de causas. ¿Cuál es el problema? Nos llevan 20 años. Hace 20 años o más están trabajando en esto, por eso tienen los buenos niveles que tienen en materia delictiva. Ojo, ningún país tiene homicidios cero, rapiñas cero y hurto cero, pero si han llegado a niveles delictivos que la sociedad los considera tolerables”, aseveró.
“Hacia ahí es donde tenemos que apuntar nosotros”, sentenció el ministro del Interior.