Hacer política tiene mucho de negociar, ceder y acordar, y también de discutir y confrontar ideas. El péndulo se mueve en ese escenario. Y hay dirigentes que se sienten más cómodos en uno u otro extremo.
La diputada frenteamplista Cristina Lustemberg es una de las que prefiere estar en la vereda del zurcido y la búsqueda de entendimientos.
Durante más de seis años, Lustemberg —que fue subsecretaria de Salud en el último gobierno de Tabaré Vázquez— trabajó dialogando con distintos sectores políticos para sacar adelante un proyecto de ley que reorganiza políticas en primera infancia, infancia y adolescencia, uno de los temas de especialidad de la legisladora que es médica pediatra. El año pasado la iniciativa se aprobó en la Comisión Especial de Población y Desarrollo de Diputados con el apoyo de todos sus integrantes, e incluso con respaldo del presidente, Luis Lacalle Pou.
En los primeros días de octubre de 2023, el proyecto dio un paso más y obtuvo media sanción en la Cámara baja. Allí no consiguió unanimidad, pero sí una mayoría muy amplia: 76 en 86.
Luego pasó al Senado, donde fue derivado a la comisión correspondiente. Y desde entonces quedó estancado.
Este lunes, hablando en TV Ciudad, Lustemberg se mostró muy frustrada por esa situación y cuestionó al sistema político en general durante una discusión en la que se mencionaban las cifras de pobreza infantil, todo un lastre en nuestro país.
A partir de estos cuestionamientos, el conductor de En perspectiva Emiliano Cotelo conversó con la diputada Lustemberg.
La dirigente política señaló que “los intentos de autoeliminación”, sobre todo en adolescentes, “son la punta del iceberg de situaciones gravísimas que existen, como son las crisis de ansiedad o depresión”.
Además, Lustemberg recordó que hoy en Uruguay “hay 157.000 niños y adolescentes viviendo por debajo de la línea de la pobreza”.
“Eso es la pobreza medida por ingreso, pero los que trabajamos en infancia y adolescencia sabemos que es una multidimensionalidad, con las características que tienen los hogares. La infancia no se puede abordar sin las considerar las características que tienen los referentes adultos: padres, abuelos. Hay que trabajar mirando el acceso al mundo del trabajo, de la vivienda, las características socioeducativas que tienen los adultos”, señaló.
En esta línea, señaló que “Uruguay no puede darse el lujo de que exista una desigualdad tan marcada”.
“Nuestros hijos deben poder acceder a determinados recursos y no que haya un Estado que se aleja de garantizar derechos. Los políticos no nos podemos cobrar cuentas todo el tiempo sobre lo que hizo durante 15 años de gobierno el Frente Amplio”, dijo Lustemberg.
La diputada contó que el otro día recorrió el barrio del Municipio CH y le “pareció que estaba en otro país”, en comparación a otros lugares que ha recorrido.
A su vez, contó una situación desagradable que le tocó vivir hace días atrás, cuando la intentaron rapiñar.
“El viernes en la ruta pensé que había atropellado un perro volviendo de Salto. Nos pararon dos motos con cuatro personas armadas en la ruta 1. Eran las 3:27 de la madrugada. No fue un siniestro. Atropellamos a un perro porque nos lo tiraron para que paráramos”, relató Lustemberg, en referencia al intento de robo que sufrió.
Sobre el proyecto de ley que presentó para atender a la primera infancia, infancia y adolescencia que está trancado en el Senado, la diputada aseguró “que está esperanzada” de que la Cámara alta trate y apruebe la iniciativa.
“Tengo la firme esperanza de que la Cámara de Senadores tenga la madurez política para que este proyecto de ley sea una prioridad. Lo he hablado con el coordinador de bancada del FA, José Carlos Mahía, y con la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, para que también sea prioridad por parte de la coalición. Es importante que la ley se vote, se reglamente por parte del Poder Ejecutivo y se empiece a implementar. Hay que llegar antes del próximo presupuesto nacional. Los niños y los adolescentes no pueden esperar más”, afirmó.
En este sentido, Lustemberg recordó que en Uruguay actualmente hay 30.000 niños y adolescentes que viven en hogares, que aunque no llueva, “no tienen baño ni saneamiento”.
“Con paredes y techo de desecho, y piso de tierra. ¿Así le parece que un niño va a aprender, a estudiar? ¿Que no va a reproducir una situación de violenica?”, añadió.
A grandes rasgos, el proyecto que impulsa la diputada pretende la creación de un gabinete de primera infancia que sea coordinado por el Ministerio de Desarrollo Social, que genere sinergia con diferentes organismos del Estado para atender la situación de niños y adolescentes en situación vulnerable.