El intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, se comunicó este martes con las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública para suspender las clases presenciales en las escuelas, tras constatarse casos positivos de covid-19 en varios centros educativos del departamento.

Aunque Olivera manejó la cifra de 40 centros educativos involucrados, no todos dependen de ANEP explicó Silva, ya que entre los incluidos hay varios centros CAIF (dependientes del Ministerio de Desarrollo Social) y también privados.

El pedido también se realizó al Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (Inau).
Este jueves el conductor de En Perspectiva, Emiliano Cotelo, consultó a Olivera sobre la actual situación del departamento de Paysandú y la concentración de personas que se dió en el entierro de Jorge Larrañaga. 

En Perspectiva · Entrevista Nicolás Olivera - La situación sanitaria que atraviesa Paysandú es “gravísima”

Olivera señaló que los números y los datos indican que se "está en una situación gravísima".

"Hablamos de 30 muertos en los últimos 10 días y ayer hubo tres más. En una ciudad y un departamento como Paysandú, esas 30 persona que fallecieron son totalmente conocidas por gran parte de la gente", graficó el jerarca.

Olivera indicó que el objetivo de su fuerte salida pública es que se vuelva a "tener la poca percepción al riesgo que alguna vez se tuvo".

"Uno se va anestesiando. Al principio se morían los chinos, después en Europa, en otros países y después empezó a morir algún uruguayo muy mayor. Pero ahora el 80% de la gente que está en CTI es menor de 60 años. El propio director del cementerio me dijo que se tiene un espacio, pero que en algún momento va a colapsar", sostuvo Olivera.

El nacionalista alertó por la saturación del sistema de salud, tanto público como privado, e insistió en que "hace un pedido, un clamor a la gente de Paysandú de que entienda" la necesidad de restringir las actividades no esenciales.

"Hay tantas situaciones como conductas humanas puede haber. Cada tanto nos llega, mirá que fulano tiene covid, está en cuarentena y salió a comprar al boliche. ¿Qué hay que hacer? ¿Tenemos que poner un guardia en cada lugar y cada casa?", se cuestionó Olivera.

El intendente dijo que hoy en departamento además de los eventos y los espectáculos, están también los espacios públicos restringidos y las ferias.

El jerarca departamental sostuvo que debido a que "el mayor brote de contagios es intrafamiliar", se apela a que la gente pueda acompañar las medidas.

"Pedimos que aflojemos la reunión del sábado de noche, la tomada de mate el domingo en la plaza. Son esas cosas las que equilibran la balanza, el objetivo es poder frenarlas", resumió.

Cuestionado sobre las cientas de personas que participaron del entierro del exministro y exsenador Jorge

Larrañaga el pasado lunes, Olivera manifestó que la "exhortación fue a reducir lo más posible la concentración de gente, pasa que es como agarrar el agua entre los dedos, se te va".

"Vuelvo al tema de la escala. Le puedo asegurar que la inmensa mayoría de los sanduceros tienen alguna experiencia, contacto o relación con quién fue ministro y 10 años intendente como lo fue Jorge Larrañaga. Era imposible frenar a la gente para que no le diera el último adiós. Teníamos que poner el ejército para que la gente no saliera", se justificó Olivera.

Agregó, a su vez, que "pudo haber sido mucho peor".

"En las calles (que haya aglomeraciones) es inevitable, qué quiere que le diga. Lo mismo que le pasó al presidente Vázquez. Un hombre querido y la gente salió a acompañarlo. No se convocó a un acto político ni a la gente a acompañar. La gente de forma voluntaria y espontanea trato de estar y quiso estar en un momento tan duro, aunque se intentó hacer todo lo que se podía", apuntó Olivera.

Respecto a las medidas que tomó el departamento, Olivera explicó que se solicito a las autoridades de la educación la suspensión de la presencialidad y a INAU lo mismo para los CAIF. En el último caso, el pedido fue respondido y se habilitó el cierre de esas instituciones para todo el departamento.

Con respecto a nuevas medidas de restricción, Olivera sostuvo que "es difícil porque la gente está cansada, el músculo se distiendo por naturaleza".

"No se puede estar hace un año y tres meses todo el mundo guardado. En algún momento la necesidad hace que usted tenga que salir y encontrarse con otra gente. Por eso es que en este momento, en que viene bien la vacunación, hay que pegar una última embestida para guardarse lo más posible en estos 14 días. Creo que si todos dejamos de hacer actividades superfluas, baja bastante", concluyó.