En la actualidad, y con el cierre parcial de fronteras aún vigente, la empresa de transporte internacional Buquebus sólo mantiene una frecuencia semanal entre Argentina y Uruguay. Los viajes son cada viernes, y tiene como fin repatriar uruguayos trasladar a argentinos con residencia en nuestro país.
En los últimos días, estos traslados fueron noticia luego de que en departamento de Maldonado se conocieran dos casos positivos de coronavirus (padre e hijo) que habían llegado al país en el viaje del pasado viernes. Estas personas supieron que alguien cercano a ellas había dado positivo en Argentina, por lo que se comunicaron con autoridades sanitarias y se sometieron a un hisopado.
Jesús Bentacur, intendente de Maldonado, reaccionó airadamente ante la situación y sugirió que en el puerto de embarque, y previo a abordar, se exigiera un certificado de test negativo realizado entre 24 y 48 horas antes.
En las últimas horas, la compañía anunció que daría un paso más instalando un laboratorio a bordo y realizando tests previos al embarque. Lógicamente, si un pasajero arroja resultado positivo, se quedará en tierra.
El infectólogo uruguayo Jorge Facal es uno de los asesores de la compañía acerca del diseño de los protocolos de seguridad sanitaria. Esta mañana, el profesional dialogó con el periodista Emiliano Cotelo en su programa En perspectiva, que emite Radio Mundo.
En cuanto a los cambios que experimentará dicho protocolo, Facal recordó que "hasta ahora el protocolo establecido era un triage, completar un formulario y una declaración sanitaria por parte de los pasajeros" antes de abordar", tramite similar al que realiza cualquiera que ingresa al país por cualquier vía controlada, o las personas que van a someterse a una cirugía. Se trata de un interrogatorio acerca de posble contacto del pasajero con personas infectadas o la presencia de síntomas en él mismo.
"Luego se le hacen los controles de temperatura y, tanto al abordar como al desembarcar, un interrogatorio con la presencia de un médico", explicó.
Para Facal, más importantes que todo lo antes descrito "son las medidas de prevención que se toman durante el viaje: el uso permanente uso de tapabocas , el distanciamiento físico, la limpieza con alcohol en gel, la distribución ordenada de los pasajeros, cada sector con su baño, el levantarse en forma individual y ordenada, y que cada vez que alguien va al baño se desinfecta todo de nuevo".
En cuanto a los pasajeros que dieron positivo días después de su arribo, señala que fueron "dos asintomáticos (los de Maldonado) y uno en Montevideo que consultó después, tras presentar síntomas".
A partir de ahora, contó Facal, a las medidas descritas se suma el hisopado antes del embarque, que se hará en el puerto antes de partir y se procesará en los laboratorios instalados a bordo.
Facal comentó que resultado estaría listo en aproximadamente dos horas. Por ello "los pasajeros deben llegar al puerto con antelación. La muestra se extrae antes de que se inicien los trámites migratorios, de despacho de equipaje, etcétera".
Sin embargo, Facal destaca que tanto el hisopado como el test PCR, que detecta virus en las vías respiratorias altas, son "una fotografía del momento" y no una garantía.
"Si alguien da negativo a un test antes de subir a un barco o a un avión, quiere decir que en ese momento no tiene virus en las fosas nasales o en la parte posterior de la faringe, pero lo puede estar incubando". En ese sentido, recordó que el periodo de incubación es en promedio "de entre seis y sete días2 con un máximo de catorce.
Por ello, los pasajeros que arriban a Uruguay deben después someterse "a una cuarentena de siete días y luego realizarse un hisopado, o una cuarentena de catorce días si no quieren hacerse ese hisopado".
Para Facal, lo más importante es que, mas allá de que tres personas hayan embarcado sin saber que portaban el virus, "si todos los pasajeros mantuvieron las medidas a bordo, y lo veremos con mucha probabilidad hoy (cumplidos siete días del viaje se someterán a pruebas) , van a ser negativos. Y si algunos son positivos habría que tratar de situarlos en el barco, porque podrían haberse contagiado en Argentina".
"Si hay contagios es porque alguien afloja en las medidas, y es lamentablemente lo que está pasando con estos brotes que hemos tenido, no sólo con el de Buquebus, que tiene tres casos conocidos", señaló. Si se cumplieron las medidas, los hisopados de hoy darían negativo".
Facal recordó que la "tranquilidad definitiva" no está cerca y que "por meses, o quizá algún año, deberemos aprender a convivir con el riesgo", y enfatizo que estos tests que incorpora la compañía son "una medida más" sumada al resto, y que lo realmente importante es "el paquete de medidas" adoptadas y su cabal cumplimiento.
Incluso indico que las cuarentenas son necesarias pero no perfectas. "Si alguien que llegó en un vuelo humanitario en barco, decide hacer cuarentena, estará con su familia, que entra y sale, con objetos". Por ello, para mayor seguridad debería someterse a una cuarentena en asilamiento total y exactamente controlada, algo que no sería practicable en la mayoría de los casos.
"Lo más importante es cumplir con todo el conjunto de medidas que recomienda el mundo en la pandemia", remarcó.