El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca anunció ayer la extensión hasta fin de año de la emergencia agropecuaria, que había sido declarada ante el déficit hídrico que afectó a buena parte del país.

Hablando en rueda de prensa, el ministro Fernando Mattos explicó que la resolución se adopta para mantener, en particular, el apoyo crediticio que se le viene otorgando a los productores afectados por la situación.

El ministro afirmó que la medida se toma pese a que el país va camino a la normalidad en cuanto a precipitaciones, y que los pronósticos indican que en el último semestre del año habrá lluvias por encima del promedio.

El subsecretario de Ganadería, Juan Ignacio Buffa, explicó que en los últimos tres años el país ha estado en emergencia agropecuaria. “Una seca tiene impactos puntuales que son muy importantes”, agregó. El impacto a nivel económico para los productores ronda los mil millones de dólares, expresó el jerarca.

“Atendiendo los efectos acumulados que ha tenido la seca, el ministro decide prorrogar la emergencia agropecuaria”, sostuvo Bufffa, y explicó que actualmente el país está en una etapa de normalidad, pero los efectos de secas anteriores están acumulados.

Sobre cuándo volverán los suelos a las etapas normales que habían antes de la sequía, Buffa adelantó que se prevé que sea sobre fin de año, sobre todo en rubros como los cultivos. “La gente va a plantar mucho maíz con este año llovedor”, agregó en entrevista con En perspectiva.

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