El presidente Luis Lacalle Pou no está dispuesto a que los clásicos entre Peñarol y Nacional se disputen sin hinchas visitantes, según allegados al mandatario citados por el diario El País.

El fiscal de Flagrancia Fernando Romano —a cargo de la investigación de los incidentes del clásico del domingo pasado en el Gran Parque Central— había manifestado, en diálogo con Subrayado, que le parecía “preocupante” que no se pudo evitar el ingreso al estadio de un “inflable” que simulaba una gallina con los colores de Nacional en la tribuna de Peñarol, además de “banderas alusivas a algún hincha de Nacional fallecido”.

Por eso, para Romano, las opciones que tendrían que manejar las autoridades deberían ser: que los clásicos se jueguen “sin parcialidad rival” o en el Estadio Centenario.

El Director de Convivencia y Seguridad Ciudadana, Santiago González, discrepó con el fiscal Romano, argumentando que, “los peores problemas” que han sucedido se dieron en el Centenario, y añadió: “No le sigo el razonamiento [al fiscal], es entregarse, es entregarle el deporte, entregarle una fiesta a un grupo de violentos cuando, además, se está en camino a ganársela”, sostuvo González.

Según El País, el Poder Ejecutivo tiene una postura asumida respecto a que, las sanciones impuestas a las personas que son detectadas participando en incidentes en los partidos, deberían ser más duras.

Este miércoles, los conductores de En Perspectiva Emiliano Cotelo y Romina Andrioli conversaron con Romano para profundizar sobre su postura sobre este tema.

El fiscal insistió en la idea de que el Estadio Centenario es el “único escenario donde se podía jugar con las parcialidades tanto de Peñarol como de Nacional”.

En esta línea, Romano sostuvo que el Centenario es el único escenario que tiene “todas las condiciones para evacuar porque tiene varias vías de salida”.

“En realidad, yo no estoy en condiciones de incidir en decisiones de políticas públicas y deportivas. No es mi rol; mi rol es ser fiscal y analizar si hay conductas delictivas”, aclaró.

Consultado sobre ese tipo de declaraciones, Romano dijo que “además de fiscal es ciudadano”.

“Cuando me invoca el director de Seguridad Ciudadana quiero creer que me invoca como ciudadano, no como fiscal. Más allá de mis declaraciones, que me parece no se exceden. Si bien por mi cargo tengo que analizar e investigar hechos delictivos, como ciudadano tengo todo el derecho de opinar, no de sugerir, porque le corresponde al Ministerio del Interior, pero fundamentalmente a las instituciones: Nacional, Peñarol y la Asociación Uruguaya de Fútbol”, afirmó.

Con respecto a los dichos de Santiago González de que el del clásico fue un operativo exitoso, Romano dijo que no compartía la visión del jerarca del Ministerio del Interior.

“Más allá de que no hubo lesionados ni ninguna vida que tengamos que lamentar, yo no podría llamar de exitoso un operativo en el que hay 17 ómnibus de 50 que quedaron destrozados. En el que ingresan un inflable o una tela que se prende fuego alusivo al rival”, afirmó el investigador, que mencionó otros hechos como el ingreso de parciales de Nacional de la tribuna Abdón Porte a la Atilio García y el cruce de piedras que se dio entre tribunas.

En relación con otras declaraciones de González, en referencia a que “se está ganando la pelea”, Romano se preguntó “qué pelea se está ganando”.

“En enero un jugador profesional como Schiappacasse hubiera ingresado el arma, hubiera sido un desastre dentro o fuera de la cancha. Desde la cárcel, un preso conocido produjo la muerte de un hincha de Nacional luego de un clásico. En enero hubo dos fallecidos. Yo no responsabilizo a nadie, pero me parece estamos lejos de ganar la lucha”, afirmó.

En entrevista en Punto de Encuentro, en 970 Universal, el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana había dicho que los “peores problemas” que han sucedido se dieron en el Centenario.

“No le sigo el razonamiento, es entregarse, es entregarle el deporte, entregarle una fiesta a un grupo de violentos cuando, además, se está en camino a ganársela”, respondió González a declaraciones previas de Romano.