La fiscal Mirta Morales imputó este martes a un ex marinero por el homicidio muy especialmente agravado de los tres infantes de la Marina. Además fueron imputados un hombre y una mujer por el encubrimiento de ese delito. La fiscal dijo que, en principio, el móvil del ataque fue el hurto de las armas de reglamento de los militares. El imputado por los homicidios fue infante de marina hasta marzo, y conocía el lugar y a dos de las víctimas.

¿Cómo se aclaró este episodio y cómo se hizo de forma tan rápida? Para responder estas preguntas en la mañana de este miércoles Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo, entrevistó al fiscal de Corte Jorge Díaz.

Díaz explicó que desde el día del ataque se comenzó a relevar la escena del crimen y se consiguieron una serie de elementos que permitieron a la fiscal Morales y a su equipo conseguir rápidamente evidencia científica que incriminó al sospechoso.

"Por un lado la ausencia de violencia para el ingreso, dado que si alguien pretende entrar a una zona militar va a haber una resistencia. La posición de los cadáveres, no había forma de defensa. La cantidad de disparos.. La utilización del doble disparo, que es propio de alguien que tiene entrenamiento policial o militar. El hecho de que todas las vainas estaban detonadas en la misma arma y las huellas dactilares en el pestillo", enumeró el fiscal de Corte.

Consultado sobre la hipótesis de que los homicidios eran parte de un ataque del narcotráfico al Estado, Díaz lo descartó "absolutamente". "Si se analizan los hechos se descarta la opción del narcotráfico o la presencia de un cártel extranjero. No estamos hablando de un atentado. En principio está claro que los hechos ocurrieron de esta manera (robo de armas) y todas las demás hipótesis caen", señaló, y agregó que las armas 9mm son "altamente apreciadas en el mundo delictivo".

Con respecto a la violencia y crueldad del hecho, el fiscal indicó que en 2019 ya hubo homicidios a policías para robar las pistolas pero que es nuevo que se ataque a tres personas, y expresó que estos hechos "deberían hacer cuestionar a la sociedad".

"Uno ojeaba las redes sociales el domingo y el lunes y me asusta la sociedad en la que estamos viviendo. Las teorías conspirativas, los disparates que se dijeron. Uno dice paren el mundo que me quiero bajar", manifestó.

Molestia por filtraciones internas

El fiscal de Corte se mostró molesto por las filtraciones que hubo el domingo de comunicaciones de la policía, y dijo que ya le transmitieron esa "preocupación" al ministro del Interior Jorge Larrañaga.

Además, dijo que hay "una especie de ansiedad periodística de conocer el detalle chiquito de la investigación" que puede "perjudicar a la misma".

"Es el trabajo del periodista, no me enojo con el periodista. Me enojo con el que participa de la investigación y filtra los detalles porque puede perjudicar la investigación", finalizó.