Según los estándares internacionales, Uruguay cuenta con un buen sistema de salud. Además, a nivel general, el servicio es valorado positivamente por la población. Sin embargo, existen problemas concretos y son varios los aspectos en los que podría mejorarse la atención al usuario.
Un informe del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres), presentado a principios de setiembre, identificó 10 desafíos que enfrenta el sistema, planteó propuestas de mejora y señaló oportunidades que podrían transformarse en beneficios significativos para la ciudadanía. En entrevista con En perspectiva, Florencia Betancor, que es investigadora de Ceres y una de las encargadas de este informe, detalló los desafíos.
Para este estudio, Ceres eligió la salud porque es un “área importante” para la economía, ya que es casi el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) que se representa en el gasto en salud.
“Es importante analizarlo, tenerlo en cuenta y pensar a futuro, obviamente, justamente porque también afecta la vida de las personas de manera muy directa y diaria”, explicó Betancor sobre el sistema de salud, y añadió que “en términos económicos, también mueve muchos otros sectores y dinamismos”.
La economista explicó que el informe se realizó en el marco de las elecciones para “ordenar un poco” y “sintetizar” una lista de insumos para que el próximo gobierno tenga en cuenta.
El estudio se realizó a través de “conversaciones e intercambios con especialistas, ex ministros de salud, personas, laboratorios, asociaciones de pacientes, médicos y hasta con el Instituto Pasteur”. “Quisimos hacer un abordaje bastante integral y a partir de eso elaborar nuestras conclusiones”, sostuvo Betancor.
La economista indicó que la cobertura del sistema de salud en Uruguay “es algo que se destaca” y que, tras la reforma del 2007, “se han realizado grandes avances”.
“La reforma fue buena y es bien valorada”, opinó Betancor. “Tenemos un sistema sólido hoy en día, y una de nuestras primeras conclusiones generales es que el sistema no es que necesita una nueva reforma”, añadió.
Sobre los cambios propuestos, la integrante del Ceres aclaró que “no es borrón y cuenta nueva” ni una “reforma estructural”.