El Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) resolvió este jueves que serán 531 las escuelas rurales que retomarán las clases el próximo miércoles 22 de abril y no 973 como había anunciado el gobierno la semana pasada.

Además, se resolvió que los niños tendrán clase tres días a la semana a elección del maestro y que solo se dictarán en el turno matutino y más breve, entre las 9 horas y las 12:30. Como se manejó desde un principio, la asistencia será voluntaria.

Para conocer los detalles de esta resolución en la mañana de este viernes Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo entrevistó a la directora general del CEIP Irupé Buzzetti

Buzzeti explicó que alrededor de un tercio de las 973 escuelas rurales (exceptuando a las de Canelones) tiene menos posibilidades de conexión y que de ahí surge la necesidad de volver a clase.

Sin embargo, aseguró que en la reunión que mantuvieron en la Torre Ejecutiva con autoridades del gobierno, de la educación y el Pit Cnt se establecieron condiciones para determinar los centros en que sí se podía volver a clases el 22 de abril y cuales debían tener una fase de reacondicionamiento previo a la llegada de los niños y maestros.

"Las condiciones sanitarias son muy importantes. Hay situaciones problemáticas como con el agua, donde las escuelas tienen que tener cantidad suficiente para que la cisterna funcione todo el tiempo, que los niños se puedan lavar las manos cada poco rato. En este sentido hay unas 170 escuelas que tuvimos que dejarlas para un segundo cohorte", expresó la directora del CEIP y agregó que otro tema son las situaciones edilicia, como salones que no están en perfectas condiciones o depósitos que son necesarios limpiar antes de retomar las clases.

Para estas escuelas, explicó Buzzeti, está estipulado una semana previa de trabajo para acondicionarlas y realizar una "limpieza absoluta y profunda" y se retomarán las clases una semana después, el 29 de abril, o si se necesita más tiempo, el siguiente miércoles 6 de mayo.

Además, otro tema de relevancia a la hora de definir que escuelas reabrían sus puertas el 22 de abril y cuales no fue el transporte de los maestros. Con respecto a este punto, Buzzeti explicó que se priorizó a tres grupos. En primer lugar a los 103 maestros que viven con su familia en una casa habitación al lado de la escuela, por lo que no necesitan trasladarse. Luego se tomaron los 124 maestros que, si bien no viven en el propio predio, viven en la zona de la escuela y no necesitan trasladarse en transporte público, y por último, a los 470 maestros que van a la escuela desde las ciudades pero con sus propios vehículos.

La directora de Ceip explicó que desde el gobierno se les aseguró tres cosas "muy importantes": "Primero que los padres son los que tienen la opción de mandar a sus hijos. Segundo que el Sinae (Sistema Nacional de Emergencias) nos garantizó que cada escuela abierta tendrá un centro médico al cual remitirse en cualquier situación que pueda pasar en la escuela, por ejemplo si hay algún niño que tiene fiebre o tose mucho. Y se nos dio la garantía que toda escuela abierta tendrá un auxiliar y que a todo maestro y auxiliar que se traslade a la escuela desde una ciudad se le realizará el hisopado y se le dará la vacuna antigripal".

Consultada sobre el motivo de que las clases se hayan acortado a 3 horas y media, Buzzeti expresó que se debe a que no se dará la alimentación en la escuela. Va a ser como en semana de turismo, el niño va a recibir en esos tres días que vaya un ticket alimentación para comprar en comercios de la zona".

A su vez, explicó que esta reducción de horario se aplicará también cuando vuelvan las clases en la zona urbana. "Es imposible empezar con 7 horas y media de clase. Empezaremos por 4".

Además, agregó que serán solo tres días a la semana para manejar la reapertura de los centros de forma "gradual", como se viene realizando en otros países "como China, Corea y Dinamarca".