El senador y líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, afirmó este martes que no es partidario de la suba del gasoil ni del supergás.
Horas después del anuncio del gobierno el aumento del precio de los combustibles, Manini dijo en Canal 4 que "el Estado debería hacer un esfuerzo grande" con el objetivo de mantener el precio del gasoil en particular, por su relevancia para el sector productivo y toda la economía del país.
Con respecto al supergás, sostuvo que con la entrada del invierno la suba de ese insumo afectaba "principalmente a los sectores más "frágiles de la economía".
Para conversar sobre postura de Cabildo Abierto sobre este tema, el programa radial En Perspectiva conversó en la mañana de este miércoles con el diputado por el partido Sebastián Cal.
Cal manifestó que él "no lo tomaría como una discrepancia a la decisión del gobierno", debido a que no se puede desconocer la suba del petróleo y que durante el primer año de gobierno se hizo "un gran esfuerzo por no aumentar los combustibles".
"Debemos recordar para entender la postura del partido y lo que señaló el senador Manini hacia donde va direccionada la suba de los combustibles. La parte deficitaria en el combustible es en la cadena productiva.
Debemos recordar también que la mitad del precio de los combustibles en Uruguay son impuestos y otro porcentaje importante es producción y ventas", aclaró.
En esta línea, Cal dijo que cuando se refiere a parte "deficitaria en la cadena productiva", considera los costos de producir que tiene Ancap, que incluye la compra de barriles de petróleo.
"Esa es la parte de todo ese círculo deficitaria y si no se aumentan los combustibles es difícil mantener la balanza equilibrada", explicó.
Cal dijo que la bancada de Cabildo Abierto "coincide" con la postura de Manini, de que hay que hacer todo lo que "esté al alcance en mantener dos combustibles al menos que son tremendamente necesarios".
"Uno es importante para mantener la cadena de precios que afecta al bolsillo de todos los uruguayos (gasoil) y el otro (supergás) involucra un tema sensible con la entrada del invierno", señaló.
Cal graficó que si se aumentan $ 10 los combustibles, $ 5 se van en impuestos y a la parte productiva que es la deficitaria le van a llegar $ 3 y a distribución y comercialización $ 2.
"Habría que buscar algún mecanismo especifico como de reducción de impuestos en el combustible como para poder repartir ese dinero o que la suba se pudiese trasladar específicamente para la parte productiva", apuntó Cal.
Cal planteó en este sentido que el principal cambio que se podría hacer en una situación particular como la que se está viviendo, "es la de repartir la suba de combustible entre el consumidor final y la recaudación impositiva en el combustible".
"Esa sería una buena medida para no aumentar el porcentaje que se tuvo que aumentar", dijo Cal, que propuso que la suba de precios no esté relacionado al aumento en la recaudación.
En este sentido, consideró pertinente el planteo de Manini Ríos de compensar esa falta de recaudación impositiva con recursos del fondo Coronavirus.