Después de 15 años en los que jugó un rol central en los gobiernos frenteamplistas, el contador Danilo Astori, volvió en marzo de este año a la Cámara de Senadores.
En abril, sin embargo, el ex ministro de Economía y ex vicepresidente solicitó una licencia de su actividad legislativa por su pertenencia a la población de riesgo que más complicaciones puede sufrir si contrae Covid-19.
Luego de recuperarse de una infección respiratoria que lo tuvo internado más de un mes, en el segundo semestre Astori volvió a la cancha política desde su casa, publicando columnas de opinión y concediendo algunas entrevistas de prensa por teléfono.
¿Qué análisis hace de la actualidad política y económica en este año marcado por la pandemia? ¿Cómo analiza la realidad del Frente Amplio en su rol opositor? En la mañana de este martes, el periodista Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo, dialogó con el contador Danilo Astori.
En primer lugar, Astori contó que su salud ha evolucionado de forma "muy positiva" en el último tiempo y que en un futuro "no muy lejano" podrá reincorporarse a la actividad legislativa. "Al cabo del receso (parlamentario) voy a poder asistir al Senado. De todas formas hay que ver como evoluciona el virus", dijo.
Consultado sobre la respuesta económica del gobierno ante la pandemia, Astori dijo que discrepaba. "Partimos de visiones muy diferentes de país. Una de las diferencias centrales es la que refiere al papel del Estado que tiene diversos puntos de apoyo, desde el papel de las empresas públicas hasta el papel del sector público en temas fundamentales como la salud, la educación y la vivienda. Sin el Estado, no hay tratamiento correcto e inclusivo de esos temas y veo al gobierno en la línea contraria", expresó.
En ese sentido, dijo que por ejemplo el gobierno "pone como argumento fundamental el tratamiento fiscal y actúa con una actitud contraria a la que muchos países del mundo están poniendo en práctica hoy. Esa actitud es no privilegiar el resultado fiscal de las cuentas públicas respecto al trabajo que hay que hacer de carácter contracíclico para intentar no solo lograr mejores resultados económicos sino también mejores condiciones de vida para la población".
"Uruguay vive hoy no tan gravemente como otros países de América Latina porque a mi juicio construyó, en el pasado, fortalezas que le permiten estar mejor y aprovecharlas ahora", expresó.
Consultado por Cotelo sobre la propuesta del Frente Amplio de otorgar una renta básica a la población más vulnerable, el contador dijo que compartía la idea "pero con alguna precisión".
"No me gusta hablar de renta, es un subsidio, y no me gusta definirlo como algo sin fecha. Hay que acotarlo desde el punto de vista de la fecha. Un subsidio de unos 300 dólares dedicado a unas 300 mil personas y con un plazo en principio de seis meses costaría unos 540 millones de dólares aproximadamente. Es menos de un punto del PBI. Somos uno de los países que menos esfuerzo fiscal dedica a un tema importantísimo que afecta simultáneamente a la oferta y a la demanda", argumentó.
Cotelo señaló que este no sería el único gasto que el estado tendría para paliar la situación social y económica, y que desde el oficialismo se menciona una situación fiscal frágil, heredada de los gobiernos frentistas. Además, no se conoce el fin de la emergencia sanitaria.
"Mientras discutimos, hay gente que sigue perdiendo trabajo, ingresos, hay pequeñas empresas que se destruyen y eso agrava las condiciones sociales en que vive esa gente", comenzó su respuesta Astori, y luego aseguró que el gobierno "no ha valorado como se debe las fortalezas financieras que construyó el país".
"Uruguay tiene acceso a recursos financieros. Hay un gran volumen de liquidez y tasas de interés muy bajas que siempre ayudan a sobrellevar situaciones de este tipo. Uruguay sigue manteniendo el grado inversor con cinco calificadoras. El esfuerzo es muy importante, pero Uruguay tiene como responder a ese esfuerzo", dijo, y señaló que contraer más deuda mediante préstamos sería una de las fuentes de financiamiento posible.
Renovación y autocrítica
La segunda parte de la entrevista en Radiomundo giró en torno a la renovación dentro del Frente Amplio y a la autocrítica en la coalición de izquierda.
"Me gustaría destacar que la renovación no es sustitución de unos dirigentes por otros, la renovación tiene que ser ideológica, de las maneras de hacer política que ha tenido el Frente Amplio hasta ahora, sobre todo en los últimos tiempos", comenzó, y en seguida ejemplificó haciendo una fuerte autocrítica.
"Una de las bases fundamentales del proceso autocrítico que tiene que llevar adelante el FA es que en los últimos tiempos y mientras avanzaban los tres períodos de gobierno, actuamos básicamente sin tener en cuenta o teniendo poco en cuenta a los que piensan distinto. No les hemos hecho lugar en la elaboración de reformas estructurales, en la propuesta de rumbos de política hacia el futuro", dijo.
Consultado por Cotelo sobre a quiénes no se había tenido en cuenta, Astori dijo que "quienes hoy están en el gobierno durante las administraciones del FA hicieron propuestas que muchas veces ni siquiera se tuvieron en cuenta".
"No debimos haber gobernado ignorando totalmente a los demás sin preguntarnos cómo piensa el que piensa diferente", se recriminó.
En ese sentido, dijo que esta ausencia de apertura a los demás, llevó a "cometer errores como los cometidos con el sector agropecuario".
"La pérdida del apoyo electoral de los últimos años ha sido fundamentalmente en el interior y eso tiene que ver con la forma que le dimos a nuestro vínculo con el Uruguay que está más allá del área metropolitana. No supimos encarar la realidad agropecuaria de manera que nos hubiera vinculado de una mejor forma, políticamente", dijo.
"Había una realidad que estábamos atendiendo mal y nos trajo resultados políticos que después tuvieron un saldo negativo con la pérdida del gobierno y el avance fundamental de los partidos fundacionales y en particular el Partido Nacional", prosiguió.
El líder de Asamblea Uruguay apuntó a hacer "un esfuerzo autocrítico" que lleve a adoptar una postura "no de acuerdo con quienes tienen una visión distinta, pero sí de una relación más constructiva desde el punto de vista político".
De todas formas, Astori dijo que desde el gobierno actual tampoco ha encontrado "buena respuesta" en este sentido. "El gobierno actual ha desconocido lo que ha hecho el Frente Amplio en el pasado. Estoy haciendo autocrítica pero no me estoy olvidando de los avances que tuvo Uruguay con los gobiernos del Frente Amplio y el gobierno no lo valora o no lo reconoce", criticó.
Según el contador, la administración presidida por Luis Lacalle Pou "está cometiendo errores muy parecidos a los que cometió el FA en los gobiernos anteriores".
Siguiendo con la autocrítica del Frente Amplio, Astori aseguró que "así como no se le dio cabida a quien piensa distinto a nivel nacional, también dentro del FA muchas veces no se da cabida a posiciones diferentes, confundiendo unanimidad con unidad". Consultado por Cotelo, Astori confirmó que su sector fue uno de los que sufrió esa falta de espacio.
"La unidad no es la unanimidad de opinión en un colectivo político como el FA y por otro lado, la diferencia de opiniones no es necesariamente indisciplina. El FA va a tener que acostumbrarse a tener en cuenta las diferencias de opinión. Tolerar una opinión distinta, en la acción política, trabaja mejor por la unidad, que la unanimidad forzada", dijo.
Por último, consultado sobre el ala seregnista del Frente Amplio, Astori dijo que se debe "acumular fuerzas practicando política de calidad". "Que no se tenga por objetivo asegurar el futuro de algunos sectores o de compañeros, sino el beneficio para el Uruguay y que ayude al Frente a ser una fuerza renovada, moderna, una izquierda de social democracia", concluyó.