En las últimas semanas la política exterior del gobierno ha cobrado mayor relevancia en la agenda pública.

El mes pasado el presidente Luis Lacalle Pou mantuvo reuniones de alto nivel con los mandatarios de Brasil y de Paraguay, donde trató posibles proyectos bilaterales y remarcó la demanda de Uruguay en pos de una mayor flexibilización del Mercosur. Ayer, hablando ante la Asamblea General, el propio Lacalle Pou hizo hincapié en esos encuentros y destacó en especial la coincidencia con esa postura de nuestro país que declaró públicamente la semana pasada el canciller brasileño.

Pero, a la vez, la gestión de la Cancillería ha recibido numerosas críticas, algunas de ellas desde posiciones cercanas al gobierno.

En la oposición, el diputado del MPP Daniel Caggiani, por ejemplo, declaró en M24: "No vemos una orientación clara" en política exterior, "hay una falta de perspectiva".

Desde la interna del gobierno, el Partido Colorado reclamó avanzar en "acuerdos comerciales con países fuera de la región". Además, los economistas Marcel Vaillant y Javier de Haedo han expresado cuestionamientos a una política exterior que no sería clara y no mostraría resultados.

Particularmente ha estado en el foco el Instituto Uruguay XXI, creado para facilitar exportaciones y la llegada de inversión extranjera, y que está "en punto muerto", según publicó el semanario Búsqueda.

¿Cuál es hoy a grandes rasgos la estrategia de inserción internacional del país? ¿Cómo se trabajó en estos meses de pandemia? ¿Qué logros se han obtenido en esta materia? Sobre todos estos temas conversó el periodista Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo, con el canciller Francisco Bustillo.

Radiomundo · Entrevista Francisco Bustillo - ¿Cuál es hoy la estrategia de inserción internacional de Uruguay?

"Acepto las críticas pero es importante que las críticas tengan un fundamento y es difícil tener un fundamento cuando nosotros no hemos hablado, que somos quienes estamos trabajando y negociando en la mayor ponderación y reserva", comenzó el ministro.

Sobre las valoraciones recibidas, Bustillo dijo que tiene "una gran ventaja" que es estar "aislado de las redes sociales". "Ha sido muy provechoso y me ha permitido trabajar intensamente y no estar preocupado por eso. En ese sentido, el otro día culminamos una etapa con la concurrencia a la comisión de Asuntos Internacionales de Diputados. Me había autoimpuesto silencio porque entendía que correspondía, antes de hablar en público de lo que hace a nuestra estrategia política y comercial, hacerlo propiamente en el ámbito natural que son las comisiones de asuntos internacionales del Senado y Diputados".

"He escuchado críticas y ponderaciones, lo más importante es que nosotros nos autoimpusimos silencio en razón de que no habíamos podido ir a la comisión y particularmente debido a la reserva en el manejo de los asuntos", dijo el canciller y agregó que "hasta que las negociaciones culminen no se puede dar luz".

Con respecto a los lineamientos de trabajo, Bustillo señaló que no se arranca "desde cero" porque la política exterior "es muy dinámica": "Son procesos que no se inician con este gobierno sino que se heredan de otros y que probablemente muchos de los aspectos que ojalá logremos nosotros concretar, es por imperio de muchos otros trabajos de otra administraciones".

¿Y las propuestas de Talvi?

Cotelo consultó a Bustillo sobre los lineamientos presentados por el excanciller Ernesto Talvi, días antes de dejar su cargo. El entrevistado reconoció la labor del economista durante la pandemia, pero planteó sus reparos con su presentación de política exterior.

"El asumió y a pocos días surgió la pandemia y estuvieron los famosos varados uruguayos, en razón de lo cual, tuvo que atender esa situación y poco o nada de política exterior y de inserción económico-comercial desarrolló, por imperio de las circunstancias. Fue un espléndido trabajo de rescate de los varados", dijo.

"(Pero) en el caso puntual del plan económico comercial de Talvi. ¿Usted lo vio? No hay ningún plan ni existe documento alguno que refleje los anuncios del canciller Talvi sobre su estrategia económica-comercial. Probablemente porque pocas horas después partió y no tuvo tiempo de desarrollarlo", expresó.

Consultado sobre por qué no hubo intercambio con el secretario de Estado saliente en julio de 2020, Bustillo dijo que él invitó a "todos los excancilleres" (Talvi incluido) a la presentación de su plan de trabajo a mediados de julio: "Creia importante tener oportunidad de conversar con cada uno de los excancilleres. El señor Talvi no concurrió a la presentación, tampoco me llamó para ponerse a disposición para transferir su experiencia y no se ha dado hasta el día de hoy esa comunicación".

¿Y con los partidos?

Cotelo lo interrogó sobre si había consenso entre los partidos políticos con respecto su labor al frente de la Cancillería, y Bustillo aseguró que "por supuesto que sí".

"Estaba en el debe del Uruguay darse nuevamente una política exterior de Estado. Me tomé la molestia de hablar con todos los expresidentes que me enriquecieron en esa concepción que pretendemos desarrollar y tomé contacto con los líderes de los partidos", expresó.

Los objetivos de la política exterior

"La política exterior surge de un proceso acumulativo. Estamos llevando adelante una estrategia definitiva en materia de política exterior y económico-comercial pero también heredamos mucho de gobiernos anteriores y nuestro trabajo será heredado por terceros", comenzó señalando Bustillo sobre este tema.

Entre otras cosas, aseguró que se logró "terminar con el divorcio" entre el Ministerio de Economía y el de Relaciones Exteriores, además de trabajar junto a otras carteras como Turismo, Ganadería e Industria.

Con respecto al Mercosur, en primer lugar descartó de plano la posibilidad de abandonar el bloque pese a la falta de acuerdos: "Creo que nadie responsablemente puede decir que nos vamos del Mercosur".

"Se habla de no lograr nuevos acuerdos de comercio y estar pagando casi 300 millones de euros de aranceles en relación a otros países que compiten. Es cierto, pero no es menos cierto que estamos evitando pagar casi 250 millones de aranceles por pertenecer a un acuerdo de integración. Se habla desde una liviandad y se escucha la opinión de gente que no participa o que irresponsablemente plantea cosas que no son viables", expresó.

Bustillo aseguró que a lo largo de la historia "se ha logrado algún tipo de flexibilidad", como cuando se logró el acuerdo con México, o el avance en negociaciones con Corea del Sur e Israel.

"Los presidentes han conversado. Ha sido muy bueno y se ha avanzado en muchos aspectos, dejando de lado ciertas burocracias. La intención de Brasil definitivamente de negociar con terceros aun cuando no exista la voluntad de los cuatro. Ojalá sea ese el formato que nos demos", dijo.

"La posición de Brasil es propia e independiente, pero sin dudas reposa en saber cuál es la posición de Uruguay, que estamos de acuerdo con eso y trabajando en esa línea. Si además sumamos lograr la voluntad de los cuatro, o de tres, o de dos... Me animo a decir que hay dos que estamos de acuerdo: Brasil y Uruguay. Argentina no se niega, han sido generosos en incorporar un planteo que hicimos nosotros, en considerar la flexibilización", prosiguió.

"Estamos dando pasos solos pero con la prudencia del caso porque lamentablemente creo que Uruguay ha logrado cosas mucho más allá del propio tamaño específico que tiene y de la propia proyección que podía esperarse de un pequeño país como somos. Tenemos un lugar muy bien ganado a lo largo de la historia en política exterior, una voz que se respeta y se escucha eso nos permite sentarnos en la mesa pero, en términos futbolísticos, no tenemos volumen de juego. Es otro el peso que tienen Brasil y Argentina en una mesa de negociación, a diferencia de Uruguay o Paraguay", sentenció.

Puntos de negociación

Cotelo consultó a Bustillo cuáles serían los países con los que se buscaría negociar en caso de lograr la ansiada flexibilización del Mercosur.

En respuesta, Bustillo dijo que cuando visitó Rusia se le planteó "un acuerdo con el esquema de integración al que pertenecen con el Mercosur".

"También en Turquía, el canciller nos planteó hacer un acuerdo Mercosur-Turquía", prosiguió, y mencionó que "está arriba de la mesa el acuerdo con la Unión Europea".

"Particularmente nos importa avanzar en el mercado de Medio Oriente. Identificamos que de alguna forma se había descuidado y que presenta posibilidades enormes, sobre todo teniendo en cuenta que los aranceles en Medio Oriente discurren entre el 0 y el 5%".

China

"La llegada de las vacunas es la demostración del espléndido trabajo que venimos desarrollando con China. No es que ahora vamos a descubrir que Uruguay es importante para China y que nosotros somos importantes para China en razón de que llegaron las vacunas", declaró Bustillo sobre el tema.

En el mismo sentido, aseguró que hay una "excelente relación" con el país asiático: "Tenemos una asociación estratégica y la intención de convertirla en una asociación estratégica integral, que es un estadio más desde el punto de vista político en la relación estrecha que pretendemos llevar adelante con China".

Uruguay XXI

Con respecto a los recortes en Uruguay XXI y a las declaraciones de que se encontraba en "punto muerto" su actuación, Bustillo aclaró varios puntos.

"No hay problemas personales, no me los podría permitir porque tengo responsabilidades importantes. No tengo ningún inconveniente con el señor Miller (Jaime, director ejecutivo) y tenemos un excelente diálogo", comenzó.

Además, dijo que "si hay alguien que valora el trabajo de Uruguay XXI es cualquier funcionario diplomático del Uruguay. Es un instrumento valioso en materia de promoción comercial que viene acompañando a lo largo de muchísimos años".

De todas formas, admitió que hubo discrepancias: "Las diferencias se dan cuando presentan el Plan Ejecutivo, lo recibimos y la verdad que dejó mucho que desear. Ahora sí vino un nuevo plan y definitivamente se incorporaron aspectos que entendíamos fundamentales".

Respecto a ese plan, señaló que se presentó hace unos 10 días y que aún no ha sido aprobado porque se está estudiando.

"De todas formas ha seguido trabajando e interactuando con la Cancillería", aclaró el secretario de Estado y aseguró que hubo "mala intención" cuando se habló de que la agencia estaba parada.

Sobre el recorte presupuestal, dijo que "es el mismo que en todos los ministerios en razón de la eficiencia pretendida por el Ejecutivo".