Desde la semana pasada circulan entre vecinos de Villa Española mensajes en los que se les pedía que no salieran a la calle porque podría haber tiroteos. El jueves pasado, un joven de 21 años fue asesinado de un disparo en la cabeza y la banda a la que pertenecía había jurado venganza.

Las líneas de ómnibus tuvieron que modificar sus recorridos debido a las balaceras ocurridas en esa parte de la ciudad. El delegado de la Unott, Richard Conte, señaló que se trata de una zona muy conflictiva, pero en la que también viven unas 23 mil personas que usan las líneas 79 y 306 todos los días.

Debido a estos hechos, el alcalde del Municipio D, Gabriel Velazco, suspendió las tareas de limpieza, iluminación y barrido en el barrio para proteger a los trabajadores.

El patrullaje se extenderá hasta por 20 días, mientras se instrumentan acciones a más largo plazo.

Este miércoles, los conductores de En perspectiva Emiliano Cotelo y Romina Andrioli conversaron con Velazco para profundizar sobre la preocupante situación que vive el barrio.

El alcalde señaló que la coyuntura no es puntual, sino que hace un mes, así como hace dos meses, ocurrió lo mismo.

“Villa Española está complicado desde el punto de vista de la seguridad desde hace un buen rato. Eso nos ha llevado a suspender actividades no solo laborales, sino de tipos sociales. Nos afecta en toda la vida social que tiene el territorio, en el barrio”, resumió.

Velazco relató que hubo un tiroteo importante en la puerta de la escuela que hay al lado de Funsa, “en plena hora de la salida de la escuela”.

Sobre los mensajes que han trascendido con relación a la guerra narco que se está dando en el barrio, Velazco apuntó que “lo alarmante es que haya gente que se mueva con ese nivel de impunidad, al plantear que es dueña de un terreno o barrio”.

“Estamos preocupados. Compartimos la idea de los trabajadores del transporte de desviar la línea de ómnibus para no correr riesgo, pero también es bueno que se sepa que esa medida expone mucho más a los vecinos que van a tomar el ómnibus. Tienen que caminar más cuadras, dos o cuatro cuadras más hacia la parada”, afirmó.

“La situación del vecino común y corriente, que es trabajador o estudiante, que vuelve de noche a su casa, es de mucho mayor exposición. Comprendemos que hay que proteger al trabajador del transporte, pero también el vecino común queda bastante expuesto”, añadió.

Sin embargo, Velazco aclaró que ha habido negociaciones con el Ministerio del Interior y se ha avanzado para que prontamente se repongan las líneas con custodia.

“Es algo que ya practicamos en el barrio Marconi, que son dos puntos complicados de nuestro territorio. Villa Española y Marconi. En el último pasó lo mismo con el 405. Esa línea no entraba, pero el Ministerio del Interior del gobierno anterior proporcionó un ómnibus que hacía el cruce del barrio”, informó.

“Aunque no se vea cuando se escuchan tiroteos —que no necesariamente son de persona a persona, pueden ser al aire para demostrar poderío de fuego—, uno no sabe hacia dónde va dirigido y se genera mucho nerviosismo. Mucho miedo. La gente se encierra en su casa y los trabajadores se sienten expuestos”, relató Velazco.