Luego del referéndum por los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC), el Gobierno comenzó a llevar adelante uno de los puntos que se buscaban derogar: el mecanismo para dar título universitario a la formación docente.

Hoy en día los docentes formados por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) no tienen título, ya que el organismo no puede otorgarlo por no ser una autoridad universitaria. La resolución emitida por el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) dispone un cambio en la currícula de formación docente de ANEP y la instauración de un examen final, que será diseñado por el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed).

Este aspecto fue respondido con rechazo por la oposición, pero también por el Sindicato de Docentes de Formación en Educación (Sidfe). Entrevistado por el programa En Perspectiva (Radiomundo 1170 AM), el presidente de este sindicato, Líber Romero, explicó las razones detrás de la negativa a la modificación.

El sindicalista manifestó que “el proceso de titulación” sería lo indicado y no “la titulación en sí”. En este sentido, sostuvo que los gremios de la enseñanza “siempre” han “peleado por una Universidad de la Educación autónoma, cogobernada y pública”.

Romero señaló que “el único motivo” por el cual un título universitario “podría servir” es para realizar posgrados en el exterior; la Universidad de la República (Udelar) permite que los docentes estudien posgrados en Uruguay a pesar de no contar con título universitario, pero “en muchas partes del mundo también nos aceptan el título de grado para hacerlo”, acotó.

Asimismo, sobre la reforma de la currícula de la ANEP que plantea la resolución del MEC que afectaría a los futuros docentes. Según el presidente del Sidfe, esto conlleva “un cambio de paradigma” de docencia: ”Basta ver la cantidad de horas que se le asigna a determinados núcleos formativos y hay una pérdida concreta de horas en lo que tiene que ver con conocimiento específico, con el conocimiento pedagógico y didáctico de lo que está planteado el MEC en relación con lo que actualmente tiene formación docente”, formuló.

A modo de ejemplo, comentó que el proyecto del MEC “plantea un promedio de 3.000 horas para las carreras” cuando actualmente hay unas 3.700. Pero además, insistió Romero, el hincapié que hace el ministerio “lo hace sobre lo que son herramientas profesionales, vinculadas a la gestión, a informática, a inglés, en detrimento de otros elementos que para nosotros no solamente son fundamentales en la formación de un docente sino que son parte de una rica tradición que tiene la formación docente en el Uruguay”, como son la formación pedagógica, sociología de la educación o la pedagogía.