Desde los primeros minutos de partido Wanderers fue el que el equipo que tomó la iniciativa. Algo previsible al comienzo, luego fue encontrando la mejor elaboración del fútbol de la mano de Santos, Santiago Martínez y Blanco.
El bohemio tenía la pelota y de a poco iba volcando el trámite sobre el área de Carini, ante un Juventud que se dedicó en la primera parte a estar ordenado en el fondo y esperar una contra.
La oportunidad para abrir el partido llegó a través de la pelota quieta. Mauricio Gómez remató notablemente un tiro libre a los 19 y decretó la apertura.
El tanto dio confianza a Wanderers que redondeó una buena primera etapa, con ventaja justa, pero careciendo de profundidad en los últimos metros de su ataque.
Para la parte complementaria Juventud salió con otra actitud, presionando por momentos y tratando de cortar más lejos de su área el circuito futbolístico de los de Gastón Machado.
Más allá del cambio de postura a los pedrenses le costó mucho inquietar al Cachorro Burián y más desde la expulsión de Reyes a los 63'.
Wanderers pese al hombre de más mantuvo su planteo del segundo tiempo, donde esperó que Juventud quedara expuesto en defensa para matar de contragolpe.
Así el local dispuso de alguna chance para ampliar, la más clara de Chapita Blanco, pero ninguna finalmente concretada. Ganó bien el bohemio, sin sobrarle nada, y sigue en el lote de los equipos de arriba, que se ilusiona con el Uruguayo.