La contrarreloj de la Vuelta Ciclista del Uruguay, cuyo inicio estaba fijado para hoy miércoles a las 7:45 horas en Paysandú, fue aplazada hasta el mediodía y arrancará con varios competidores menos de los que arribaron el martes a tierras sanduceras, debido a algunos abandonos que se están confirmando por estas horas y altas médicas.
Ciclistas de varios equipos, así como también jueces y oficiales de la organización, amanecieron con cuadros virales, vómitos, diarrea y fiebre. Algunos de ellos se encuentran internados, por lo que los comisarios de la carrera aplazaron la largada hasta las 12. El segundo tramo del día, que irá hasta Mercedes, iba a empezar a las 11:25, pero será a partir de las 15:30.
Todo apunta a una intoxicación de alimentos que afectó a varias delegaciones, y la principal coincidencia se dio en la cena del comedor municipal sanducero. El Telégrafo de Paysandú afirma que algunos ciclistas acarreaban cierto malestar desde el día anterior, por lo que no descartan que el problema haya comenzado en Tacuarembó.
En la misma línea, el Club Ciclista Deportivo San Antonio, de Florida, informó mediante un comunicado que sus ciclistas “tuvieron que ser atendidos por síntomas de diarrea y vómitos, algunos con cuadro de deshidratación” en la llegada de la cuarta etapa, que largó desde Caraguatá y tuvo su punto de llegada en Tacuarembó.
Entre los afectados está el brasileño Kléber Ramos, quien lideraba la clasificación general individual con una ventaja de 18 segundos respecto al argentino Alejandro Quilci, del Cerro Largo. Quien fuera malla líder hasta el martes se bajó del evento junto a todo su equipo, el UniFunvic-Pindamonhangaba. Tampoco seguirá el Sindicato Argentino de la Televisión (SAT).