Volvió el boxeo en Nicaragua con público y estrictas medidas contra el coronavirus

Volvió el boxeo en Nicaragua y fue noticia. La cadena ESPN lo transmitió para todo el continente americano y la atención estaba más centrada en las medidas a tomar para la prevención por el coronavirus que en lo que pudieran hacer dentro del rink los boxeadores, la mayoría de los cuales son absolutos desconocidos en el plano internacional.

La velada fue organizada por la promotora ‘Búfalo Boxing’, del bicampeón del mundo Rosendo "Búfalo" Álvarez, en el Polideportivo Alexis Argüello de Managua. La entrada era gratuita y el evento tuvo el apoyo y el impulso del Gobierno nicaragüense, que ante las críticas que recibe por su trato ante la pandemia del momento quiso dar un mensaje.

Con obligación de usar tapabocas fue llegando la gente al escenario. Antes de hacer su ingreso se tomó la temperatura a los presentes, y todo aquel que tenía más de 37 grados era enviado a su casa. Además, había en las puertas de acceso alfombras con cloro para desinfectar la suela de los calzados. El alcohol en gel para frotarse en las manos también fue obligatorio.

Los asistentes de los boxeadores lucieron barbijos y guantes de látex, al igual que los árbitros y los presentadores de las peleas. Los propios púgiles subieron con barbijos que sólo se quitaron en el cuadrilátero, donde además fueron rociados en su totalidad de desinfectante.

Las promotoras que habitualmente suben con un cartel de un número en sus manos anunciando el comienzo de un nuevo round, fueron suprimidas. Apenas hubo una que se encargó de anunciar todos los asaltos con una vestimenta mucho más sobria que de costumbre.

Uno de los combates más esperados fue el que Freddy Fonseca le ganó a Alain Aguilar en la categoría peso ligero. En combate pactado a seis rounds, sólo se disputaron cuatro. Aguilar no salió al quinto, por lo que Fonseca fue proclamado ganador. En la pelea de fondo, pactada a ocho asaltos, Robin Zamora venció por decisión unánime a Ramiro Blanco en peso ligero

Al gobierno nicaragüense, que en ningún momento se opuso a la continuidad del campeonato de fútbol de primera división (que sigue disputándose pero sin público) se lo acusa de ocultar información y hasta el momento reconoce tres muertes sobre un total de 12 casos confirmados.