Federico Valverde atendió a los medios presentes en Abu Dabi este domingo después de la primera práctica de la selección uruguaya pensando en la Copa del Mundo, y su primera respuesta fue respecto a la foto que se sacó junto a un Halcón en el Safari de Madrid.
“Mi mujer organizó todo y fuimos a que mi hijo disfrutara. Ya aprovechamos y fuimos a ver las aves”, recordó, y valoró que “la gente se sumó a lo del Halcón”, el nuevo apodo que le puso Diego Alonso a comienzos de año, “y a mucha gente le gustó”.
“A mí me gustó y me causaba mucha gracia. En mi casa hay gente enfadada porque querían que me siguieran diciendo Pajarito, pero ahora soy el Halcón”, agregó entre risas el mediocampista de 23 años, quien cree que hubo algo más que un cambio de apodo en su proceso.
“A nivel futbolístico mejoré bastante y de cabeza. Maduré mucho dentro y fuera de la cancha. Creo que eso también ayudó a cambiar el apodo”, señaló, y valoró el apoyo de quienes lo rodean “para que siguiera concentrado en los objetivos a nivel individual y grupal, sea en Real Madrid o en la selección”.
Ponderó la importancia de “seguir aprendiendo y madurando como padre y pareja, y seguir siendo un buen hijo”, dentro de un “proceso que se trabajó con tranquilidad”. “Me costó y me ayudó a crecer y a ser quien soy hoy”, dijo.
El momento de quiebre fue “antes de que llegara Diego [Alonso] a la selección”. Por entonces “no estaba teniendo los minutos que realmente quería y no trabajaba tampoco para conseguir esos minutos”.
“La gente que me ayudó: nutricionista, coaching, mi mujer, mis padres estando ahí al lado, y amigos que siempre están ahí para aconsejarme, me hicieron abrir la cabeza y ver otras herramientas para que pudiera conseguir lo que aspiraba, que era jugar en Real Madrid y ser pieza fundamental en Uruguay”, reconoció.
Hoy llega “muy ilusionado” a Catar 2022 y con la ansiedad que arrastraba de días previos para el reencuentro con los compañeros y el cuerpo técnico, con quienes anhelaba “el día a día porque siempre es lindo compartir un mate y hablar de lo que vive cada uno en sus equipos”.
“Eso es hermoso y hay que valorarlo porque no siempre vamos a estar en la selección. El tiempo que estemos hay que disfrutarlo. Estamos ilusionados con intentar dejar una huella linda y dejar bien parado al país”, añadió.
Consultado por su objetivo de “hacerse cargo” del equipo, aclaró que su rol es otro. “Mi intención es dar lo mejor de mí y entregar el 100% al equipo y al cuerpo técnico en la posición que sea. Estoy muy ilusionado por todo lo que los compañeros transmiten en el día a día y lo que me brindan y me aconsejan desde el cuerpo técnico. Todo eso fomenta la ilusión”, concluyó.