El equipo de Leonardo Ramos ganó uno de esos partidos de título. De local, ante un grande y tras estar dos veces abajo en el score, se impuso 3-2 en la hora y mantuvo el liderazgo junto a Nacional.

De pique se vio que sería un encuentro intenso y de rápidas transiciones. A los 2’ Ángel Rodríguez sacudió a Etulain con un buen zurdazo a distancia, y a los 9’ un centro de Saracchi que se fue cerrando se estrelló en el horizontal del arco defendido por Frascarelli.

Peñarol abrió la cancha, buscó con Nández y Albarracín por afuera y con Junior Arias bajando unos metros para recibir. Así fue como a los10’ el ex Liverpool probó de afuera y exigió a Etulain a volar para mandar la pelota al córner.

De ese tiro de esquina llegó el 1-0 a los 12’; Leodán González marcó falta por un claro agarrón de Olivera sobre Arias y el nueve mirasol asumió la pena máxima para reventarle el arco al elenco franjeado. El remate fue potente y rompió una sequía colectiva de 387 minutos.

Esa primera ventaja le duró apenas cuatro minutos al equipo de Da Silva, ya que a los 16’ igualó de cabeza el zaguero argentino Rocaniere tras un tiro libre ejecutado por Gonzalo González.

Apenas segundos más tarde recuperó la renta Peñarol, cuando Arias sacudió de zurda con un buen recurso en el área aprovechando un balón que le bajó Nández de cabeza.

Pero otra vez Danubio lo empató rápido en su primer ataque. Jonathan dos Santos, compañero de Olivera en ofensiva, tuvo tiempo y espacio desde afuera del área para castigar con un tremendo derechazo que dejó sin asunto a Frascarelli, de lenta respuesta.

Luego no hubo más goles pero se mantuvo el ritmo. Los dos siguieron yendo y la pelota no pagó peaje en el mediocampo, y el que estuvo más cerca de llevarse la ventaja al descanso fue Peñarol, que encontró a Albarracín inspirado por izquierda y a Nández cumpliendo por derecha.

El ex Wanderers no repitió en el complemento y Da Silva puso en su lugar a Dibble a los 14’. A esa altura había bajado revoluciones el encuentro y del otro lado Leo Ramos reforzó el mediocampo con la entrada de Ghan por José Luis Rodríguez, desplazando a Ignacio González a la banda izquierda y a Saracchi a la línea de fondo.

Cuando era un poco más el elenco mirasol y se aproximaba con las corridas de Nández por su carril diestro, Bressan vio su segunda amonestación por una innecesaria falta muy lejos de su arco sobre Dos Santos e hipotecó las posibilidades aurinegras.

Da Silva reacomodó el fondo con la entrada de Perg por Guzmán Pereira y llevó a Nández a la zona de contención y a Dibble al costado derecho. Gastón Rodríguez se ubicó por la izquierda y Arias quedó como único delantero, pero no hubo casi jugadas de peligro en el tramo final para la visita. Apenas un pelotazo largo que no pudo controlar Arias.

Ramos apostó por la velocidad de Ardaiz en lugar de Olivera, y cuando prácticamente no generaba nada aprovechó un contragolpe y lo terminó ganando precisamente con Ardaiz. El joven delantero agarró mal parado al fondo mirasol, remató de zurda tras gran corrida y selló el 3-2 favorecido por un rebote en Valdez.

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