Hace una semana se dio el tercer combate entre Conor McGregor y Dustin Poirier. Pero la historia no terminó de la mejor forma para el irlandés ya que sufrió una fractura de tibia en la pierna izquierda en el final del primer asalto.
Salió de la jaula en camilla y, al otro día, tuvo que someterse a una intervención quirúrgica. Ya en el proceso de rehabilitación, The Notorious rompió el silencio y habló sobre cuál fue el motivo de esta dura lesión.
"La gente me pregunta: ¿Cuándo se rompió la pierna? ¿En qué momento? Pregúntenle a Dana White, pregúntenle a UFC, pregúntenle al Dr. Davidson, el médico jefe de UFC. Sabían que tenía fracturas por estrés en la pierna al entrar a la jaula", dijo McGregor en un vídeo en su cuenta de Instagram.
Dejó en claro que arrastró varios problemas físicos de cara a la pelea con Poirier: "Hice sparring sin espinilleras y pateaba la rodilla un par de veces. Así que tuve múltiples fracturas por estrés en la espinilla por encima del tobillo y luego tuve problemas con el tobillo de todos modos a lo largo de los años de jodidas peleas todo el tiempo. Incluso hice muchas sesiones de entrenamiento cuando me dolía el tobillo, no dejaba de entrenar."
El peleador de 33 años se lo vio de buen animo y andando en un carrito motorizado mientras realizó el video. "Necesitaba recibir tratamiento en mi pierna y nunca me hubiera comprometido a pasar por el quirófano a menos que hubiera sucedido algo como esto. Entonces voy a entrar y conseguir exactamente lo que necesitaba y lo que necesitaba era una espinilla de titanio. Así que ahora tengo eso en la rodilla hasta el tobillo y el médico me dijo que es irrompible", expresó.
"Salí de la cirugía y me sentía muy eufórico. El trabajo estaba hecho y yo estaba como, ‘Sí, tengo esto. Será fácil. Pues hacer esto sin problema'. Y luego choco contra una pared, tengo mucho dolor, mi movilidad va a ser así durante un tiempo. No serán unos días o incluso algunas semanas, llevará un poco de tiempo", concluyó McGregor.