Pablo García ganó el primer título de su vida este sábado. Tras una extensa trayectoria como jugador sin vueltas olímpicas, se le dio el primer festejo siendo director técnico del PAOK, que conquistó la Copa de Grecia. En la final venció 2-1 al poderoso Olympiakos, campeón de la Super Liga griega en nueve de las últimas 11 temporadas, incluyendo las últimas dos.
No obstante, apenas cuatro días después del logro, el PAOK anunció la salida del director técnico uruguayo para el retorno de Razvan Lucescu, entrenador rumano que en la temporada 2018/19 llevó al PAOK a ganar su tercer título de liga y el primero en el Siglo XXI, ya que los dos anteriores fueron en 1976 y 1985.
El presidente del club, Ivan Savvidis, explicó que “el fútbol se rige por decisiones cotidianas difíciles que hay que tomar con la mente clara y dejando de lado las emociones”. “Hoy el club tomó una de las decisiones más difíciles. Esto concierne a Pablo García”, manifestó, y contó que le ofreció al Canario seguir ligado al club desde otra posición.
“Le agradezco desde el fondo de mi corazón que no tuvo miedo, se arriesgó y se responsabilizó del equipo en un momento crítico para nosotros, lo llevó a la victoria en la Copa y en la mayoría de los partidos críticos y en los entrenamientos demostraron lo que significa el ADN del PAOK”, señaló, aunque explicó que el club debe “marcarse nuevas metas”.
“El objetivo del PAOK es formar parte de la élite europea y arraigarse firmemente en este complejo entorno. Nos espera un camino difícil y cuesta arriba, pero no pretendemos detenernos. Un siglo de historia del PAOK nos encontrará más fuertes, con nuevos títulos que traeremos al club”, concluyó el comunicado del presidente.
Pablo García asumió la dirección técnica del PAOK a fines de diciembre de 2020, cuando dirigía al equipo sub-19 y tomó el mando del plantel ante la partida del portugués Abel Ferreira, que recaló en el Palmeiras cuando iban seis fechas de la Super Liga.
En las categorías formativas del PAOK, el ex mediocampista uruguayo de 44 años logró 83 triunfos, 16 empates y cuatro derrotas en 103 cotejos, y en el primer equipo el balance fue de 23 partidos ganados, nueve empatados y nueve perdidos, terminando segundo en la Super Liga a 26 puntos del Olympiakos y campeón en la Copa de Grecia.