Tras una semana muy dura a nivel personal y familiar por el fallecimiento de su madre por COVID-19, Lucas Torreira retornará a España el miércoles para reincorporarse al Atlético de Madrid y espera estar a la orden de Diego Simeone el próximo jueves. Así lo explicó en una extensa nota con el programa ‘Polideportivo’ de Canal 12 este domingo.
Consultado por su deseo de jugar en Boca Juniors, que lo manifestó el pasado jueves en diálogo con ESPN, dijo que lo tiene “hace mucho tiempo”. “Con la situación que vengo viviendo con mi familia, con la pérdida de mi mamá, se acelera un poco más”, confesó, y reconoció haber hablado con Juan Román Riquelme, vicepresidente xeneize, “pero no de fútbol”. “Siempre hablo con él. Si bien me agradeció por haber hablado muy bien del club, quiso saludar a mi familia en este momento”, contó.
Dijo ser hincha de Boca “desde muy chico”. “Acá en Fray Bentos estamos pegados a Gualeguaychú y se consume mucho los programas argentinos de deporte. Siempre dije que Boca es un equipo que siempre me gustó por su manera de jugar, por su manera de entender el fútbol, por su gente, por sus futbolistas y por la gran historia que tiene”, agregó.
“Estas últimas dos temporadas no han sido las mejores porque el Arsenal me dejó salir y fue una decisión que me dolió muchísimo, porque creí haber hecho bien las cosas en dos temporadas en el club. Irme fue una decisión mía porque necesitaba jugar. Nunca me manifestaron que no iban a tenerme en cuenta, pero me lo hacían saber porque no tenía minutos y fue lo que me dolió. La primera temporada había sido muy buena”, recordó.
“Después llegar al Atlético de Madrid con mucho entusiasmo y tener muy poco protagonismo en casi un año es algo que a uno le duele porque trato de hacer bien las cosas para jugar. Cuando no juego me siento un poco frustrado”, manifestó Torreira, quien dijo no haber recibido mensajes desde su club por las declaraciones y aclaró que su relación con el entrenador colchonero, Diego Simeone, “es buena”.
“El club, los compañeros y el personal médico se han portado de maravilla conmigo con toda esta situación que estoy viviendo. Fui muy claro y expresé mi deseo de estar cerca de mi familia, que es lo que más me interesa. Acabamos de perder a la mujer más importante de nuestras vidas y lo más importante es la familia y no la pelota”, afirmó.
“Yo no sé cuál es la intención del Atlético. Ellos hicieron un préstamo sin opción de compra. Mi intención cuando llegué al club era poder demostrar para que el club me compre a fin de año, porque jugar en el Atlético era un deseo que tenía. Más allá de no tener los minutos que quiero, he pasado muy bien y es un club donde te hacen sentir muy cómodo”, valoró.
“El ambiente en el Atlético es muy sano y poder compartir vestuario con Luis (Suárez), Josema (Giménez) y otros grandes jugadores, y estar entrenando con el profe Ortega son cosas importantes que a uno lo llenan de mucho orgullo. Pero hoy quiero hacer un gesto de vida y estar cerca de mi familia y sobre todo de mi papá, que es a quien más le cuesta porque acaba de perder a su compañera de hace más de 40 años. Somos seis hermanos que estamos haciendo nuestras vidas y él queda solo. Será un proceso muy largo”, argumentó.
Sabe que su llegada a Boca Juniors no es fácil porque después de que expire su contrato con el Atlético de Madrid el 30 de junio tendrá que volver al Arsenal, donde tiene dos años más de contrato. “Mi representante está en eso y se verá después de la Copa América”, agregó, y reconoció que nunca pensó en volver en este momento al fútbol uruguayo.